/ sábado 2 de abril de 2022

Encuéntrate mujer | En busca del amor

En el nombre del amor se han tomado muchas decisiones equivocadas que traen múltiples consecuencias para tu ser; la creencia de que nacemos incompletas y debemos por tanto ganarnos el amor de los demás junto con su aprobación para poder ser felices, sigue siendo un obstáculo enorme para el despertar.

El sentido del amor inicia desde la infancia, de acuerdo a como recibimos y percibimos el amor que nuestros padres o educadores (abuelitos, tías etc) nos dan; para las mujeres, el padre nos muestra un modelo de lo que es un hombre, es nuestro primer amor, el primer modelo del amor masculino, será una referencia de lo que buscamos en una pareja, para repetir y estar con alguien como él, o para buscar lo contrario.

Por ejemplo si tenemos un padre que nos enseña que somos merecedoras de ser queridas, cuidadas, y respetadas por un hombre así, es decir, si tenemos un padre con un manejo sano de autoridad, interesado, afectuoso, nos enseña a tener confianza en nosotras mismas, a sentirnos merecedoras del amor de un hombre; esto alimenta nuestra seguridad. Pero cuando el padre está ausente, me refiero principalmente a la ausencia afectiva y no hay ese sentido de pertenencia, de validación y de cubrir sus necesidades, se desarrollará una necesidad de reconocimiento y una necesidad muy fuerte de ser querida y vista por él.

Por otra parte, nuestra madre tiene un papel fundamental en la formación de la autoestima. Desde que somos pequeñas, la madre es nuestra referencia de lo femenino y de lo que seremos como mujeres. El respeto, el cuidado y la valoración que practique consigo misma influirá en el trato que nos daremos a nosotras mismas. Cuando tenemos un modelo de madre tradicional (sacrificada, impotente, víctima, que no sabe poner límites) nos enseña un modelo muy pobre de ser mujer, y también a sentir la necesidad desesperada de tener un hombre.

Cuando desafortunadamente tenemos padres que nos dan todo lo contrario del amor, empezamos a tener sensación de vacío permanente; este vacío afectivo desde la infancia parece no tener fondo, porque mucho de lo que han hecho por llenarlo consiste en esforzarse para agradar a los demás, para ser reconocida, aceptada, para ser linda, buena madre etc. Y por lo tanto no aprendemos a estar solas, porque es una experiencia de dolor que no quieres repetir.

Aquí hay unos puntos para identificar cuando no sabes estar sola:

\u0009•\u0009Siempre tienes un plan, porque estar sola sin hacer nada te genera angustia.

\u0009•\u0009Cuando llegas a tu casa prendes la tv o pones música para no escuchar el silencio

\u0009•\u0009Cuando tienes relaciones que ya están muertas, y aún te quedas ahí

\u0009•\u0009Cuando no tienes actividades sola (ir al cine, viajar, pasear, etc)

\u0009•\u0009Pides opinión a todo el mundo para tomar una decisión

\u0009•\u0009Cuando piensas que tener una pareja a tu lado significa no estar sola

A veces se nos hace más fácil amar al otro que a nosotros mismos; confundimos amar con depender y amar no es depender, tememos que el otro no esté, porque nos cuesta convivir con nuestro vacío.

Hoy en tu vida adulta tienes la solución de poder recuperarte y darte ese amor que andas buscando. A partir de mañana cuando te levantes y te digas enfrente del espejo ¿qué puedo hacer hoy por ti? ¿Qué puedo hacer para ayudarte y sentirte mejor? Y perdónate por todo lo que hiciste o dijiste; ya es tiempo de comprender que hiciste todo lo necesario para ser mejor. Cada etapa nueva requiere que te vayas transformando en una versión nueva de ti; ten paciencia y perdona los errores que una y otra vez cometiste, y sé lo más sincero y honesto contigo misma: ¿qué quieres hacer?, ¿a dónde quieres ir?, ¿qué se te antoja?, ¿qué te molesta?

Y empezar a vivir y a hacerte feliz, a cuidarte y ayudarte. Porque de lo contrario, toda relación con el otro va a ser desde tu carencia; nadie puede ser feliz desde la carencia. El atenderte, mimarte, autocompletarte y autodefinirte es la tarea que tienes que emprender cada día, tarea que se renueva segundo a segundo.

Todo esto tiene que ver con la soledad, y cuando llegas a estar con otra persona tiene que ser alguien que realmente valga la pena, porque es tu tiempo, porque cuando ya aprendes pasártela bien contigo y tienes que compartir ese espacio con alguien más, tendrá que valerlo.

En conclusión, debemos tener en cuenta que amarnos a nosotros mismos desde una filosofía de vida es una responsabilidad individual que debemos procurar en nuestra cotidianidad, procurando las mejores cosas para nosotros mismos y evitando todo aquello que nos dañe, como victimizarnos, exigirnos más de la cuenta, descalificarnos, hablar mal de nosotros mismos.

Ser feliz contigo mismo es una clave muy importante para que la persona adecuada se acerque a ti. Observa tu nivel de autoestima, no te conformes con cualquiera por el simple hecho de querer que haya alguien.

No tengas prisas, primero sé feliz en tu momento presente y plantea tus propias exigencias: ¿Qué cualidades debe tener la persona ideal para ti? Enuméralas y piensa si eso ya existe en ti.

Y recuerda: la mejor relación de tu vida es la que mantienes contigo mismo; si ésta va bien, encontrarás al mejor compañero o compañera de viaje.

Y recuerda: si no te amas a ti misma, vas a mendigar amor.

Viridiana Ulin de los santos

Psicóloga, Tanatóloga y Terapeuta Infantil

Previa cita: 99 33 44 19 89

En el nombre del amor se han tomado muchas decisiones equivocadas que traen múltiples consecuencias para tu ser; la creencia de que nacemos incompletas y debemos por tanto ganarnos el amor de los demás junto con su aprobación para poder ser felices, sigue siendo un obstáculo enorme para el despertar.

El sentido del amor inicia desde la infancia, de acuerdo a como recibimos y percibimos el amor que nuestros padres o educadores (abuelitos, tías etc) nos dan; para las mujeres, el padre nos muestra un modelo de lo que es un hombre, es nuestro primer amor, el primer modelo del amor masculino, será una referencia de lo que buscamos en una pareja, para repetir y estar con alguien como él, o para buscar lo contrario.

Por ejemplo si tenemos un padre que nos enseña que somos merecedoras de ser queridas, cuidadas, y respetadas por un hombre así, es decir, si tenemos un padre con un manejo sano de autoridad, interesado, afectuoso, nos enseña a tener confianza en nosotras mismas, a sentirnos merecedoras del amor de un hombre; esto alimenta nuestra seguridad. Pero cuando el padre está ausente, me refiero principalmente a la ausencia afectiva y no hay ese sentido de pertenencia, de validación y de cubrir sus necesidades, se desarrollará una necesidad de reconocimiento y una necesidad muy fuerte de ser querida y vista por él.

Por otra parte, nuestra madre tiene un papel fundamental en la formación de la autoestima. Desde que somos pequeñas, la madre es nuestra referencia de lo femenino y de lo que seremos como mujeres. El respeto, el cuidado y la valoración que practique consigo misma influirá en el trato que nos daremos a nosotras mismas. Cuando tenemos un modelo de madre tradicional (sacrificada, impotente, víctima, que no sabe poner límites) nos enseña un modelo muy pobre de ser mujer, y también a sentir la necesidad desesperada de tener un hombre.

Cuando desafortunadamente tenemos padres que nos dan todo lo contrario del amor, empezamos a tener sensación de vacío permanente; este vacío afectivo desde la infancia parece no tener fondo, porque mucho de lo que han hecho por llenarlo consiste en esforzarse para agradar a los demás, para ser reconocida, aceptada, para ser linda, buena madre etc. Y por lo tanto no aprendemos a estar solas, porque es una experiencia de dolor que no quieres repetir.

Aquí hay unos puntos para identificar cuando no sabes estar sola:

\u0009•\u0009Siempre tienes un plan, porque estar sola sin hacer nada te genera angustia.

\u0009•\u0009Cuando llegas a tu casa prendes la tv o pones música para no escuchar el silencio

\u0009•\u0009Cuando tienes relaciones que ya están muertas, y aún te quedas ahí

\u0009•\u0009Cuando no tienes actividades sola (ir al cine, viajar, pasear, etc)

\u0009•\u0009Pides opinión a todo el mundo para tomar una decisión

\u0009•\u0009Cuando piensas que tener una pareja a tu lado significa no estar sola

A veces se nos hace más fácil amar al otro que a nosotros mismos; confundimos amar con depender y amar no es depender, tememos que el otro no esté, porque nos cuesta convivir con nuestro vacío.

Hoy en tu vida adulta tienes la solución de poder recuperarte y darte ese amor que andas buscando. A partir de mañana cuando te levantes y te digas enfrente del espejo ¿qué puedo hacer hoy por ti? ¿Qué puedo hacer para ayudarte y sentirte mejor? Y perdónate por todo lo que hiciste o dijiste; ya es tiempo de comprender que hiciste todo lo necesario para ser mejor. Cada etapa nueva requiere que te vayas transformando en una versión nueva de ti; ten paciencia y perdona los errores que una y otra vez cometiste, y sé lo más sincero y honesto contigo misma: ¿qué quieres hacer?, ¿a dónde quieres ir?, ¿qué se te antoja?, ¿qué te molesta?

Y empezar a vivir y a hacerte feliz, a cuidarte y ayudarte. Porque de lo contrario, toda relación con el otro va a ser desde tu carencia; nadie puede ser feliz desde la carencia. El atenderte, mimarte, autocompletarte y autodefinirte es la tarea que tienes que emprender cada día, tarea que se renueva segundo a segundo.

Todo esto tiene que ver con la soledad, y cuando llegas a estar con otra persona tiene que ser alguien que realmente valga la pena, porque es tu tiempo, porque cuando ya aprendes pasártela bien contigo y tienes que compartir ese espacio con alguien más, tendrá que valerlo.

En conclusión, debemos tener en cuenta que amarnos a nosotros mismos desde una filosofía de vida es una responsabilidad individual que debemos procurar en nuestra cotidianidad, procurando las mejores cosas para nosotros mismos y evitando todo aquello que nos dañe, como victimizarnos, exigirnos más de la cuenta, descalificarnos, hablar mal de nosotros mismos.

Ser feliz contigo mismo es una clave muy importante para que la persona adecuada se acerque a ti. Observa tu nivel de autoestima, no te conformes con cualquiera por el simple hecho de querer que haya alguien.

No tengas prisas, primero sé feliz en tu momento presente y plantea tus propias exigencias: ¿Qué cualidades debe tener la persona ideal para ti? Enuméralas y piensa si eso ya existe en ti.

Y recuerda: la mejor relación de tu vida es la que mantienes contigo mismo; si ésta va bien, encontrarás al mejor compañero o compañera de viaje.

Y recuerda: si no te amas a ti misma, vas a mendigar amor.

Viridiana Ulin de los santos

Psicóloga, Tanatóloga y Terapeuta Infantil

Previa cita: 99 33 44 19 89