/ jueves 23 de febrero de 2023

Ejes Ambientales | ¿Basura o Residuos Sólidos en Tabasco?

“Existe una significativa contaminación ambiental por el manejo inadecuado de residuos sólidos urbanos, ya que a nivel estatal se generan 2 mil 171 toneladas diarias, de las que solo efectúan una disposición adecuada los municipios de Centro y Comalcalco. El resto es manejado de forma inadecuada, con una cobertura de recolección del 65%, lo que ha propiciado la proliferación de 650 tiraderos a cielo abierto en áreas rurales y suburbanas del estado”

Diagnóstico en el Plan de Desarrollo del Estado de Tabasco, 2019-2024

Cada seis años el Gobierno del Estado publica la principal herramienta de planeación para nuestro desarrollo, pero a pesar de que las autoridades están conscientes de los problemas de contaminación provocados por el mal manejo de los residuos sólidos, la situación prevalece. Cada seis años la ciudadanía tenemos la esperanza de que se resolverá este problema creciente, sobre todo en la actual administración que prometió la transformación y que no se repetirían los desaciertos del pasado, sin embargo la contaminación, los daños a la salud y los problemas socioeconómicos provocados por el mal manejo de los residuos continúan.

Tuve la intensión de comenzar esta columna con una frase esperanzadora de la Doctora Cristina Cortinas Durán, destacada investigadora en nuestro país y más allá de nuestras fronteras, quien desde hace décadas ha diseñado y ejecutado proyectos para la elaboración de planes de manejo, así como de gestión y manejo integral de los residuos sólidos urbanos, manejo especial y peligrosos a lo largo y ancho de nuestro querido México, pero también en otros países de la región de América Latina y el Caribe. De igual manera pretendía empezar con alguna frase crítica del experto en gestión de residuos, Carlos Álvarez Flores. Finalmente decidí en comenzar con el diagnóstico del PLED Tabasco 2019-2024 como prueba de que las autoridades en turno conocen a fondo la problemática añeja de los residuos solidos, pero deben considerar que es creciente, que los modelos de producción y los hábitos de consumo varían año con año.

Abundando en el Plan de Desarrollo, solo quedan menos de dos años para concluir la actual administración estatal y municipales, pero no se aprecian avances en el objetivo “Incrementar la gestión y prevención ambiental con acciones que atiendan las causas y reduzcan los efectos negativos al ambiente”; como tampoco considero que exista cumplimiento en las estrategias y líneas de acción comprometidas en dicho documento publicado en el periódico oficial del gobierno estatal, que a la letra dicen: “Establecer una gestión integral sustentable de residuos sólidos urbanos y de manejo especial; Aplicar programas innovadores para mejorar la gestión y el manejo integral de residuos; Actualizar la legislación existente y emitir nuevos instrumentos regulatorios, para reducir la generación de residuos sólidos y lograr la disposición adecuada de los mismos; Ampliar las oportunidades de mercado para mejorar el aprovechamiento de los materiales reciclados, composta y biogás; Promover el desarrollo y la aplicación de nuevas tecnologías, para el manejo y tratamiento eficiente de residuos sólidos; y Fortalecer la regulación de las actividades de manejo de residuos especiales y residuos tratados para disposición final”. Mientras no se cumplan con estos compromisos formales seguiremos utilizando el término de basura o deshecho sin poder transitar al concepto de residuos.

Aquí cabe hacer mención que la propia constitución mexicana establece que el tema ambiental, dentro de ellos el de residuos sólidos, es de concurrencia para los tres órdenes de gobierno. En el que cada uno tiene una competencia, en este caso los residuos peligrosos lo debe atender la federación, los de manejo especial corresponden a los gobiernos de los estados y los urbanos son responsabilidad de lo municipios. En cada legislación en materia ambiental y de residuos solidos existen un capitulo para la distribución de competencias y coordinación, que muchas veces se ignoran u omiten su aplicación, invadiendo facultades entre uno y otro orden.

Como lo comente en mi pasada columna, el problema de origen es que se continúan tomando decisiones sin tener los estudios actualizados de composición de la basura en todo el territorio tabasqueño; es decir, no se conocen los volúmenes de residuos, su peso y temporalidad en la generación; salvo el caso ejemplar del municipio de Jalpa de Méndez, que recientemente ya cuenta con el estudio correspondiente y ello, les facilitará el establecer estrategias y acciones para hacer más eficiente sus procesos de recolección, barrido, tratamientos y disposición final de aquellos subproductos de residuos que no tengan un valor en el mercado, acompañando su estrategia con una amplia comunicación en medios y concientización a la población jalpaneca.

Otro tema rezagado es la inconsistencia de información relativa a los tiraderos a cielo abierto, también llamados clandestinos o tolerados; que son focos de contaminación al aire, suelo y mantos freáticos, infección y generadora de fauna nociva en las poblaciones cercanas a ellos. Hace cuatro años la autoridad ambiental tabasqueña y infirmó de mil seiscientos tiraderos a cielo abierto y hace unos días declaró que eran veinte ¿Cuál es el dato real?...seguro lo desconocen, porque no existe información confiable y actualizada del destino de 791 toneladas diarias [lo que representan 289 toneladas al año] que no cuentan con servicio de recolección, según dato de la autoridad ambiental estatal. Esta situación no es aceptable pues dichos tiraderos de basura no solo están en sitios tolerados, sino también van a parar a ríos, cuerpos de agua lagunares, mares, drenajes y lotes baldíos, además de las quemas continuas en la mayor parte de estos tiraderos, lo que implican emisiones de contaminantes a la atmosfera, algunos de ellos altamente tóxicos para la salud humana, que por cierto la Secretaría de Salud no mantiene informada a la población sobre las repercusiones, previsiones y atenciones sanitarias por las quemas de basura.

Un dato para tomadores de decisión: el problema de los plásticos de un solo uso son un problema para la humanidad por nuestros modelos de producción y hábitos de consumo, pero quienes desconozcan el tema les puedo afirmar que solo es la punta del iceberg, ya que hay otros residuos que están creciendo exponencialmente y no se les ha puesto atención.

Como son los casos de los residuos de manejo especial establecidos en el Reglamento de la Ley para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos en el Estado de Tabasco, entre los cuales citaré textualmente algunos de ellos como son: los residuos provenientes de las actividades de exploración, explotación, extracción y/o aprovechamiento de materiales pétreos, insumas de construcción y/o sustancias minerales no reservadas a la federación; Residuos provenientes de clínicas y hospitales de asistencia para la población humana, dispensarios médicos, clínicas veterinarias, centros de investigación, laboratorios de análisis clínicos, salvo aquellos considerados como biológico infecciosos; Lodos provenientes de las operaciones y/o procesos del tratamiento primario, secundario y/o terciario y de la conducción de aguas residuales o plantas potabilizadoras, siempre que no sean considerados peligrosos; residuos de tiendas departamentales, centros o establecimientos comerciales, o tiendas de conveniencia, centros de distribución, generados en grandes volúmenes; residuos tecnológicos provenientes de las industrias de la informática, fabricantes de productos electrónicos o de vehículos automotores; los residuos de las actividades de construcción, mantenimiento, demolición en general; Pilas que contengan litio, níquel, mercurio, cadmio, manganeso, plomo, zinc o cualquier otro elemento que permita la generación de energía en las mismas, en los niveles que no sean considerados como residuos peligrosos en la Norma Oficial Mexicana correspondiente; y finalmente las aguas residuales industriales y sanitarias. Al respecto, hasta el día de hoy no conozco una estrategia oficial del gobierno estatal para la gestión de estos residuos de manejo especial, no sabemos quién y cuanto volumen se recolecta diariamente, a donde va a parar, pues sabemos que algunos de ellos se transfieren a los sitios de disposición final de los municipios, sin tratamiento previo.

Por último, estaremos pendiente del proyecto alterno para el manejo de la basura anunciado por las autoridades a finales del 2022; además invito a la sociedad en su conjunto que tengamos un consumo y manejo mas responsable de nuestros residuos solidos generados desde casa. Aclarando que nuestra responsabilidad no termina con el poner la basura en la calle para que el personal de limpia municipal la recolecte, pues la ley y reglamentos sobre residuos establecen que somos corresponsables desde la generación hasta su disposición final de lo que generamos todos los días. Les invito a que reduzcamos nuestros consumos innecesarios, que adquiramos productos locales y aquellos que tengan envases, embalajes y empaques más amigables con el medio ambiente y nuestra salud. Ya es hora de que transformemos el concepto de basura a residuos.

“Existe una significativa contaminación ambiental por el manejo inadecuado de residuos sólidos urbanos, ya que a nivel estatal se generan 2 mil 171 toneladas diarias, de las que solo efectúan una disposición adecuada los municipios de Centro y Comalcalco. El resto es manejado de forma inadecuada, con una cobertura de recolección del 65%, lo que ha propiciado la proliferación de 650 tiraderos a cielo abierto en áreas rurales y suburbanas del estado”

Diagnóstico en el Plan de Desarrollo del Estado de Tabasco, 2019-2024

Cada seis años el Gobierno del Estado publica la principal herramienta de planeación para nuestro desarrollo, pero a pesar de que las autoridades están conscientes de los problemas de contaminación provocados por el mal manejo de los residuos sólidos, la situación prevalece. Cada seis años la ciudadanía tenemos la esperanza de que se resolverá este problema creciente, sobre todo en la actual administración que prometió la transformación y que no se repetirían los desaciertos del pasado, sin embargo la contaminación, los daños a la salud y los problemas socioeconómicos provocados por el mal manejo de los residuos continúan.

Tuve la intensión de comenzar esta columna con una frase esperanzadora de la Doctora Cristina Cortinas Durán, destacada investigadora en nuestro país y más allá de nuestras fronteras, quien desde hace décadas ha diseñado y ejecutado proyectos para la elaboración de planes de manejo, así como de gestión y manejo integral de los residuos sólidos urbanos, manejo especial y peligrosos a lo largo y ancho de nuestro querido México, pero también en otros países de la región de América Latina y el Caribe. De igual manera pretendía empezar con alguna frase crítica del experto en gestión de residuos, Carlos Álvarez Flores. Finalmente decidí en comenzar con el diagnóstico del PLED Tabasco 2019-2024 como prueba de que las autoridades en turno conocen a fondo la problemática añeja de los residuos solidos, pero deben considerar que es creciente, que los modelos de producción y los hábitos de consumo varían año con año.

Abundando en el Plan de Desarrollo, solo quedan menos de dos años para concluir la actual administración estatal y municipales, pero no se aprecian avances en el objetivo “Incrementar la gestión y prevención ambiental con acciones que atiendan las causas y reduzcan los efectos negativos al ambiente”; como tampoco considero que exista cumplimiento en las estrategias y líneas de acción comprometidas en dicho documento publicado en el periódico oficial del gobierno estatal, que a la letra dicen: “Establecer una gestión integral sustentable de residuos sólidos urbanos y de manejo especial; Aplicar programas innovadores para mejorar la gestión y el manejo integral de residuos; Actualizar la legislación existente y emitir nuevos instrumentos regulatorios, para reducir la generación de residuos sólidos y lograr la disposición adecuada de los mismos; Ampliar las oportunidades de mercado para mejorar el aprovechamiento de los materiales reciclados, composta y biogás; Promover el desarrollo y la aplicación de nuevas tecnologías, para el manejo y tratamiento eficiente de residuos sólidos; y Fortalecer la regulación de las actividades de manejo de residuos especiales y residuos tratados para disposición final”. Mientras no se cumplan con estos compromisos formales seguiremos utilizando el término de basura o deshecho sin poder transitar al concepto de residuos.

Aquí cabe hacer mención que la propia constitución mexicana establece que el tema ambiental, dentro de ellos el de residuos sólidos, es de concurrencia para los tres órdenes de gobierno. En el que cada uno tiene una competencia, en este caso los residuos peligrosos lo debe atender la federación, los de manejo especial corresponden a los gobiernos de los estados y los urbanos son responsabilidad de lo municipios. En cada legislación en materia ambiental y de residuos solidos existen un capitulo para la distribución de competencias y coordinación, que muchas veces se ignoran u omiten su aplicación, invadiendo facultades entre uno y otro orden.

Como lo comente en mi pasada columna, el problema de origen es que se continúan tomando decisiones sin tener los estudios actualizados de composición de la basura en todo el territorio tabasqueño; es decir, no se conocen los volúmenes de residuos, su peso y temporalidad en la generación; salvo el caso ejemplar del municipio de Jalpa de Méndez, que recientemente ya cuenta con el estudio correspondiente y ello, les facilitará el establecer estrategias y acciones para hacer más eficiente sus procesos de recolección, barrido, tratamientos y disposición final de aquellos subproductos de residuos que no tengan un valor en el mercado, acompañando su estrategia con una amplia comunicación en medios y concientización a la población jalpaneca.

Otro tema rezagado es la inconsistencia de información relativa a los tiraderos a cielo abierto, también llamados clandestinos o tolerados; que son focos de contaminación al aire, suelo y mantos freáticos, infección y generadora de fauna nociva en las poblaciones cercanas a ellos. Hace cuatro años la autoridad ambiental tabasqueña y infirmó de mil seiscientos tiraderos a cielo abierto y hace unos días declaró que eran veinte ¿Cuál es el dato real?...seguro lo desconocen, porque no existe información confiable y actualizada del destino de 791 toneladas diarias [lo que representan 289 toneladas al año] que no cuentan con servicio de recolección, según dato de la autoridad ambiental estatal. Esta situación no es aceptable pues dichos tiraderos de basura no solo están en sitios tolerados, sino también van a parar a ríos, cuerpos de agua lagunares, mares, drenajes y lotes baldíos, además de las quemas continuas en la mayor parte de estos tiraderos, lo que implican emisiones de contaminantes a la atmosfera, algunos de ellos altamente tóxicos para la salud humana, que por cierto la Secretaría de Salud no mantiene informada a la población sobre las repercusiones, previsiones y atenciones sanitarias por las quemas de basura.

Un dato para tomadores de decisión: el problema de los plásticos de un solo uso son un problema para la humanidad por nuestros modelos de producción y hábitos de consumo, pero quienes desconozcan el tema les puedo afirmar que solo es la punta del iceberg, ya que hay otros residuos que están creciendo exponencialmente y no se les ha puesto atención.

Como son los casos de los residuos de manejo especial establecidos en el Reglamento de la Ley para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos en el Estado de Tabasco, entre los cuales citaré textualmente algunos de ellos como son: los residuos provenientes de las actividades de exploración, explotación, extracción y/o aprovechamiento de materiales pétreos, insumas de construcción y/o sustancias minerales no reservadas a la federación; Residuos provenientes de clínicas y hospitales de asistencia para la población humana, dispensarios médicos, clínicas veterinarias, centros de investigación, laboratorios de análisis clínicos, salvo aquellos considerados como biológico infecciosos; Lodos provenientes de las operaciones y/o procesos del tratamiento primario, secundario y/o terciario y de la conducción de aguas residuales o plantas potabilizadoras, siempre que no sean considerados peligrosos; residuos de tiendas departamentales, centros o establecimientos comerciales, o tiendas de conveniencia, centros de distribución, generados en grandes volúmenes; residuos tecnológicos provenientes de las industrias de la informática, fabricantes de productos electrónicos o de vehículos automotores; los residuos de las actividades de construcción, mantenimiento, demolición en general; Pilas que contengan litio, níquel, mercurio, cadmio, manganeso, plomo, zinc o cualquier otro elemento que permita la generación de energía en las mismas, en los niveles que no sean considerados como residuos peligrosos en la Norma Oficial Mexicana correspondiente; y finalmente las aguas residuales industriales y sanitarias. Al respecto, hasta el día de hoy no conozco una estrategia oficial del gobierno estatal para la gestión de estos residuos de manejo especial, no sabemos quién y cuanto volumen se recolecta diariamente, a donde va a parar, pues sabemos que algunos de ellos se transfieren a los sitios de disposición final de los municipios, sin tratamiento previo.

Por último, estaremos pendiente del proyecto alterno para el manejo de la basura anunciado por las autoridades a finales del 2022; además invito a la sociedad en su conjunto que tengamos un consumo y manejo mas responsable de nuestros residuos solidos generados desde casa. Aclarando que nuestra responsabilidad no termina con el poner la basura en la calle para que el personal de limpia municipal la recolecte, pues la ley y reglamentos sobre residuos establecen que somos corresponsables desde la generación hasta su disposición final de lo que generamos todos los días. Les invito a que reduzcamos nuestros consumos innecesarios, que adquiramos productos locales y aquellos que tengan envases, embalajes y empaques más amigables con el medio ambiente y nuestra salud. Ya es hora de que transformemos el concepto de basura a residuos.