El candidato a la gubernatura tabasqueña, Javier May Rodríguez, ya está más tranquilo de lo que estaba, luego de la adhesión pública del ex secretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández.
Porque si bien es cierto, de que algunos movimientos políticos en el tablero del ajedrez local, evidenciaban que las diferencias entre ambos, ya habían sido superadas, todavía existía la duda en la clase política de que la reconciliación política estaba consumada.
Dando fin a una serie de especulaciones de todo los sabores que surgieron, tras la esperada unción del comalcalquense como precandidato a la máxima encomienda estatal.
Solucionada la desavenencia doméstica que más preocupaban al ex titular de Bienestar y del FONATUR, ahora tendrá el tiempo suficiente para enfocarse de lleno a conciliar con todos aquellas facciones del partido en el poder, que en un momento de ira, ofuscación, coraje, berrinche o arrebato, podrían renunciar a Morena, tal y como ocurrió con la legisladora federal, Karla María Rabelo Estrada.
Complicando no solo el triunfo de May Rodríguez, sino el de los otros abanderados a los diferentes cargos de elección popular federal y choco. Y no es precisamente porque vayan a poner en riesgo la inevitable victoria del ex funcionario federal, pero sí, la de quienes van en busca de la alcaldías y diputaciones locales que se van a disputar el 2 de junio del presente año.
Pase lo que pase, siempre y cuando las deserciones del partido guinda no se den no crezcan como bola de nieve, el arribo del ex parlamentario federal a Palacio de Gobierno, es cuestión de tiempo.
En cambio su correligionaria y candidata presidencial, Claudia Sheinbaum Pardo, se le están complicando los escenarios políticos y sociales más allá de lo previsto.
Uno de los problemas más difícil que enfrenta es el desgaste político y social que está teniendo en el último tramo de su mandato el paisano Andrés Manuel López Obrador, a causa de los señalamientos de que recibió dinero del narcotráfico para las campañas presidenciales de 2026 y 2012.
Y desde luego, los escandalosos y multimillonarios actos de corrupción en los que se involucra a sus hijos.
Sin pasar por alto, el descontento manifiesto que existe por la grotesca imposición de candidatos que injustamente desplazó a morenistas con mayores méritos, experiencias y antigüedad…
La ciudadanía que es muy inteligente, astuta y audaz, y puede pasarle la factura a la ex gobernadora de la Ciudad de México, como en su momento ocurrió con el candidato de Enrique Peña Nieto, que repartió toda la lana del mundo, y al final de cuenta, no sirvió para nada, pues el electorado mexicano votó en contra de su delfín, José Antonio Meade Kuribreña.
No es el único caso, pero sí el más reciente, emblemático y parecido.
“SQUOD SCRIPSI, SCRIPSI”
(LO ESCRITO, ESCRITO ESTÁ)
A pesar de todos los esfuerzos que se han hecho en la materia, la inseguridad sigue siendo el talón de Aquiles de la presente administración.
Sucesos sangrientos como el ocurrido en la discoteca Hope 52, en donde tres jóvenes fueron baleados en manos de un chacal y el lamentable crimen de la jovencita Damaris descuartizada por su pareja Andrés Soberano, y algunos otros hechos sangrientos tienen a los tabasqueños, y avecindados aquí, con el amén en la boca.
Los gobernados están muy preocupados y alarmados por lo que últimamente ha venido ocurriendo en distintos puntos de la geografía tabasqueña.
9Por lo que las autoridades correspondientes deben de triplicar los esfuerzos que al respecto están haciendo para que la sociedad en su conjunto esté más segura, tranquila y en santa paz.
De lo contrario, se corre el inminente riesgo de que esta ola de horrores se incremente como pasa en otras entidades del país.
Lo que por ningún motivo debe ocurrir.
Dios quiera que así sea.
