/ miércoles 12 de junio de 2019

Políticamente incorrecto

El que el gobernador Adán Augusto López Hernández haya tendido la mano (continuando con su política de reconciliación) no significa que le agarren el pie.

Traigo esto a colación, porque los ex funcionarios “granieristas” de Obras Públicas, Educación y de CEAS, Héctor López Peralta, Beatriz Luque Greene y Cliserida Rodríguez Alvarado, respectivamente, andan a nombre del mandatario Andrés Rafael Granier Melo, alborotando la gallera.

En primer lugar, no son los tiempos, para meter más ruido del que de por sí ya hay dentro y fuera del gabinete. Y en segundo, lo único que van a conseguir es que sus adversarios y detractores desaten una campaña feroz contra su jefe político.

Nadie se traga el cuento de que andan haciendo política por la libre. En palacio de gobierno y en la propia Quinta Grijalva culpan directamente a Granier Melo de lo que hacen los ex colaboradores. Igualmente ocurre afuera.

Y es que la movilidad política que se traen en los últimos días, incluido el químico, ya incómodo arriba. Y era de esperarse.

A todas luces, tienen una lectura equivocada de la política de reconciliación que han emprendido el gobernador con los diferentes grupos del quehacer político estatal.

El que no haya puesto ningún obstáculo a los granieristas, para que se desplazarán libremente por todo lo largo y ancho del territorio tabasqueño, no es un cheque en blanco, para que hagan todo lo que quieran, como indebidamente lo están haciendo.

Además, se están exponiendo a que algunos ciudadanos los insulten. Porque si bien es cierto, que quedaron legalmente exonerados de todas las acusaciones en su contra, hay un numeroso grupo de la población que está convencido de que dañaron gravemente la hacienda pública.

Héctor López Peralta es uno de los ex secretarios que se les señaló y sigue señalándosele de ser uno de las principales trácalas de ese sexenio que terminó con problemas económicos muy serios. Y Luque Greene y Rodríguez Alvarado también tienen cola que le pisen.

En su lugar, por ahora me estaría quietecito, no vaya a ser, que, en una de esas, se enoje el mero mero…y todo lo políticamente logrado, que es demasiado, se derrumbe.

Como quien dice: pian…pianito.

“SQUOD SCRIPSI, SCRIPSI”

(LO ESCRITO, ESCRITO ESTÁ)

El director General de la CFE, Manuel Bartlett Díaz, está empecinado en poner todos los óbices posibles, no solo para abortar el convenio del gobierno con la depredadora empresa, sino en hacerlo quedar muy mal ante sus gobernados, como volvió a quedar demostrado ayer, en donde se está haciendo a los usuarios firmar un contrato sospechoso, empero, la administración está empeñada en defenderla.

En lugar de poner los puntos sobre las íes, siempre sale a justificarla.

Lo cierto es, que la comunicación oficial ha dejado muchísimo que desear.

Mientras la ciudadanía no haga la parte que le corresponde con respecto a la basura y no se inviertan los miles de millones de pesos que se necesitan para prácticamente hacer de nuevo los cárcamos, el drenaje fluvial y pluvial, el municipio de Centro seguirá inundándose como todos los años.

Si antes de la anegación de 2007 había serios problemas con los cárcamos, ahora la situación está peor, ya que algunas obras de la CONAGUA, inhabilitaron a varios.

Urge pues, la colaboración estrecha de las autoridades municipales, el gobierno del estado y la ciudadanía, de lo contrario, las torrenciales lluvias van a seguir impactando, capitalmente, en las colonias populares.


El que el gobernador Adán Augusto López Hernández haya tendido la mano (continuando con su política de reconciliación) no significa que le agarren el pie.

Traigo esto a colación, porque los ex funcionarios “granieristas” de Obras Públicas, Educación y de CEAS, Héctor López Peralta, Beatriz Luque Greene y Cliserida Rodríguez Alvarado, respectivamente, andan a nombre del mandatario Andrés Rafael Granier Melo, alborotando la gallera.

En primer lugar, no son los tiempos, para meter más ruido del que de por sí ya hay dentro y fuera del gabinete. Y en segundo, lo único que van a conseguir es que sus adversarios y detractores desaten una campaña feroz contra su jefe político.

Nadie se traga el cuento de que andan haciendo política por la libre. En palacio de gobierno y en la propia Quinta Grijalva culpan directamente a Granier Melo de lo que hacen los ex colaboradores. Igualmente ocurre afuera.

Y es que la movilidad política que se traen en los últimos días, incluido el químico, ya incómodo arriba. Y era de esperarse.

A todas luces, tienen una lectura equivocada de la política de reconciliación que han emprendido el gobernador con los diferentes grupos del quehacer político estatal.

El que no haya puesto ningún obstáculo a los granieristas, para que se desplazarán libremente por todo lo largo y ancho del territorio tabasqueño, no es un cheque en blanco, para que hagan todo lo que quieran, como indebidamente lo están haciendo.

Además, se están exponiendo a que algunos ciudadanos los insulten. Porque si bien es cierto, que quedaron legalmente exonerados de todas las acusaciones en su contra, hay un numeroso grupo de la población que está convencido de que dañaron gravemente la hacienda pública.

Héctor López Peralta es uno de los ex secretarios que se les señaló y sigue señalándosele de ser uno de las principales trácalas de ese sexenio que terminó con problemas económicos muy serios. Y Luque Greene y Rodríguez Alvarado también tienen cola que le pisen.

En su lugar, por ahora me estaría quietecito, no vaya a ser, que, en una de esas, se enoje el mero mero…y todo lo políticamente logrado, que es demasiado, se derrumbe.

Como quien dice: pian…pianito.

“SQUOD SCRIPSI, SCRIPSI”

(LO ESCRITO, ESCRITO ESTÁ)

El director General de la CFE, Manuel Bartlett Díaz, está empecinado en poner todos los óbices posibles, no solo para abortar el convenio del gobierno con la depredadora empresa, sino en hacerlo quedar muy mal ante sus gobernados, como volvió a quedar demostrado ayer, en donde se está haciendo a los usuarios firmar un contrato sospechoso, empero, la administración está empeñada en defenderla.

En lugar de poner los puntos sobre las íes, siempre sale a justificarla.

Lo cierto es, que la comunicación oficial ha dejado muchísimo que desear.

Mientras la ciudadanía no haga la parte que le corresponde con respecto a la basura y no se inviertan los miles de millones de pesos que se necesitan para prácticamente hacer de nuevo los cárcamos, el drenaje fluvial y pluvial, el municipio de Centro seguirá inundándose como todos los años.

Si antes de la anegación de 2007 había serios problemas con los cárcamos, ahora la situación está peor, ya que algunas obras de la CONAGUA, inhabilitaron a varios.

Urge pues, la colaboración estrecha de las autoridades municipales, el gobierno del estado y la ciudadanía, de lo contrario, las torrenciales lluvias van a seguir impactando, capitalmente, en las colonias populares.