/ miércoles 29 de enero de 2020

Mtra. Vanessa Hernández Díaz | Qué son las vacunas, mitos y realidades

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS, 2005), una vacuna es una preparación destinada a generar inmunidad contra una enfermedad estimulando la producción de anticuerpos.

La inmunización es una de las estrategias más reconocidas y con mayor impacto en la salud pública, ya que es una de las mejores opciones para prevenir enfermedades, reducir el número de defunciones y discapacidades. De acuerdo a datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS, 2010) se estima que gracias a la inmunización cada año se evita que mueran 2,5 millones de niños. Sin embargo, a pesar de los éxitos conseguidos, millones de niños de los países en desarrollo, casi el 20% del total que nacen cada año, no completa el ciclo de inmunizaciones previstas durante el primer año de vida.

Con el paso de los años han surgido grupos anti-vacunas que se oponen a su aplicación que han atribuido falsas propiedades y efectos de las vacunas. Como mencionan Morice & Ávila (2008), las razones que argumentan estos grupos son relacionadas con mitos, creencias filosóficas o religiosas, rumores e información que no se sustenta en evidencia científica.

Los mitos que se le han atribuido a las vacunas han provocado la negativa de algunos padres de vacunar a sus hijos. La Organización Mundial de la Salud (OMS, 2018) ha tratado de aclarar las falsedades que existen acerca de este tema. Aportando argumentos para las siguientes controversias:


1. Las vacunas tienen efectos secundarios que resultan perjudiciales a largo plazo. Falso

  • La Organización Mundial de la Salud asegura que las vacunas son «muy seguras» y que «es más probable padecer un trastorno grave por una enfermedad prevenible mediante vacunación que por una vacuna».


  • 2. Si a los niños se les administra más de una vacuna de forma simultánea, se incrementa el riesgo de efectos secundarios nocivos. Falso
  • La administración simultánea de varias vacunas no tiene efectos secundarios, la toma al mismo tiempo de dos vacunas reduce las inyecciones y las molestias para el niño (OMS).


  • 3.Las vacunas provocan autismo. Falso
  • Para la Organización Mundial de la Salud «no existen pruebas científicas de una relación entre las vacunas y el autismo o trastornos autistas».


  • 4.La vacuna combinada contra la difteria, el tétanos y la tosferina, así como la vacuna antipoliomielítica, pueden provocar el síndrome de muerte súbita del lactante. Falso
  • Para la organización Mundial de la Salud «no existe una relación causal» entre la administración de las vacunas y la muerte súbita del lactante, pese a que esas vacunas se hayan tomado en un período en el que el bebé puede sufrir el síndrome.


  • 5.Las vacunas no son necesarias porque la higiene y el saneamiento harán desaparecer enfermedades como el sarampión, la rubéola y la parotiditis. Falso.
  • Según la Organización Mundial de la Salud «Si las personas no estuvieran vacunadas, algunas enfermedades que se han vuelto poco comunes, tales como la poliomielitis y el sarampión, reaparecerían rápidamente».

Los rumores falsos o sin pruebas científicas acerca de la inocuidad de las vacunas pueden redundar en perjuicio de los programas de inmunización y tener un costo en vidas.

Las vacunas no sólo salvan vidas, sino que ahorran costos. Según datos recientes de la OMS, la inmunización, incluso con las vacunas más caras, sigue siendo una inversión rentable.

Mtra. Vanessa Hernández Díaz/Docente de la Dirección Técnica de la Licenciatura en Enfermería


Referencia Bibliográfica:

Organización Mundial de la Salud (2010). Vacunas e inmunización: situación mundial, tercera edición. Ginebra.

Organización Mundial de la Salud (2018). Preguntas y respuestas sobre inmunización y seguridad de las vacunas.

Morice A. & Ávila A. (2008). Mitos, creencias y realidades sobre las vacunas. Rev. Acta pediátr costarric. 20 (2). Asociación Costarricense de Pediatría.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS, 2005), una vacuna es una preparación destinada a generar inmunidad contra una enfermedad estimulando la producción de anticuerpos.

La inmunización es una de las estrategias más reconocidas y con mayor impacto en la salud pública, ya que es una de las mejores opciones para prevenir enfermedades, reducir el número de defunciones y discapacidades. De acuerdo a datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS, 2010) se estima que gracias a la inmunización cada año se evita que mueran 2,5 millones de niños. Sin embargo, a pesar de los éxitos conseguidos, millones de niños de los países en desarrollo, casi el 20% del total que nacen cada año, no completa el ciclo de inmunizaciones previstas durante el primer año de vida.

Con el paso de los años han surgido grupos anti-vacunas que se oponen a su aplicación que han atribuido falsas propiedades y efectos de las vacunas. Como mencionan Morice & Ávila (2008), las razones que argumentan estos grupos son relacionadas con mitos, creencias filosóficas o religiosas, rumores e información que no se sustenta en evidencia científica.

Los mitos que se le han atribuido a las vacunas han provocado la negativa de algunos padres de vacunar a sus hijos. La Organización Mundial de la Salud (OMS, 2018) ha tratado de aclarar las falsedades que existen acerca de este tema. Aportando argumentos para las siguientes controversias:


1. Las vacunas tienen efectos secundarios que resultan perjudiciales a largo plazo. Falso

  • La Organización Mundial de la Salud asegura que las vacunas son «muy seguras» y que «es más probable padecer un trastorno grave por una enfermedad prevenible mediante vacunación que por una vacuna».


  • 2. Si a los niños se les administra más de una vacuna de forma simultánea, se incrementa el riesgo de efectos secundarios nocivos. Falso
  • La administración simultánea de varias vacunas no tiene efectos secundarios, la toma al mismo tiempo de dos vacunas reduce las inyecciones y las molestias para el niño (OMS).


  • 3.Las vacunas provocan autismo. Falso
  • Para la Organización Mundial de la Salud «no existen pruebas científicas de una relación entre las vacunas y el autismo o trastornos autistas».


  • 4.La vacuna combinada contra la difteria, el tétanos y la tosferina, así como la vacuna antipoliomielítica, pueden provocar el síndrome de muerte súbita del lactante. Falso
  • Para la organización Mundial de la Salud «no existe una relación causal» entre la administración de las vacunas y la muerte súbita del lactante, pese a que esas vacunas se hayan tomado en un período en el que el bebé puede sufrir el síndrome.


  • 5.Las vacunas no son necesarias porque la higiene y el saneamiento harán desaparecer enfermedades como el sarampión, la rubéola y la parotiditis. Falso.
  • Según la Organización Mundial de la Salud «Si las personas no estuvieran vacunadas, algunas enfermedades que se han vuelto poco comunes, tales como la poliomielitis y el sarampión, reaparecerían rápidamente».

Los rumores falsos o sin pruebas científicas acerca de la inocuidad de las vacunas pueden redundar en perjuicio de los programas de inmunización y tener un costo en vidas.

Las vacunas no sólo salvan vidas, sino que ahorran costos. Según datos recientes de la OMS, la inmunización, incluso con las vacunas más caras, sigue siendo una inversión rentable.

Mtra. Vanessa Hernández Díaz/Docente de la Dirección Técnica de la Licenciatura en Enfermería


Referencia Bibliográfica:

Organización Mundial de la Salud (2010). Vacunas e inmunización: situación mundial, tercera edición. Ginebra.

Organización Mundial de la Salud (2018). Preguntas y respuestas sobre inmunización y seguridad de las vacunas.

Morice A. & Ávila A. (2008). Mitos, creencias y realidades sobre las vacunas. Rev. Acta pediátr costarric. 20 (2). Asociación Costarricense de Pediatría.