/ lunes 11 de marzo de 2024

Carta Abierta | Buscan seguir con la UPCh como botín político y así retan a May

Los cambios que Ariel Cetina Bertruy ha venido aplicando en la Universidad Popular de la Chontalpa, en diálogo con la comunidad universitaria, ha motivado la reacción de grupos externos que se resisten a dejar de lucrar políticamente con la casa de estudios. Con estas acciones desestabilizadoras retan también a Javier May, metiendo ruido en la zona de la Chontalpa, donde el morenista tiene una fuerte influencia política desde hace muchos años.

Bajo esos criterios, es insostenible la actitud de quienes buscan seguir controlando la universidad desde afuera, y con ello mantener los cotos de poder que durante lustros han tenido. Al hacerlo, ponen en evidencia un claro intento por desestabilizar a los Poderes Públicos del Estado y con ello someter a la segunda institución universitaria más importante de Tabasco.

En ‘radio pasillo’ de la UPCh se dice, se especula, que uno de los principales instigadores de esta trama sería el exrector Arquímedes Oramas Vargas, quien tras su gestión dejó como herencia una nómina con muchos allegados. En las redes sociales se comenta su patrocinio a los golpes mediáticos contra la UPCh y contra el rector. El propósito es seguir imponiendo a sus afines en puestos claves de la administración universitaria.

Oramas es un priista de la vieja guardia que ha buscado cobijo en otras siglas, sin tener éxito. Una de sus más desafortunadas historias es haber incumplido un compromiso político con Adán Augusto por el tema de la candidatura de alcaldía de Cunduacán para una familiar. A pesar de haber llegado al acuerdo de una candidatura por Morena, allá por 2018, al final aceptó una oferta similar del gobernador perredista Arturo Núñez, dejando con un palmo en la nariz al entonces candidato a la gubernatura. Es más, se comenta que los acuerdos políticos con Arturo Núñez siguen vigentes.

En los últimos años se le vio muy cerca del impresentable alcalde ‘independiente’ de Cunduacán, alias El Chelo Cano, con quien aparece en unas fotos junto a Mario Llergo y el exdirigente priista Adrián Hernández Balboa.

Las presuntas tretas del exrector han llegado al búnker del candidato morenista a la gubernatura, Javier May. Aquí se ha tomado como inadmisible la pretensión de engañar a la comunidad universitaria, usando la guerra sucia para imponer los intereses de un grupo político casi clandestino.

En algunas reuniones privadas con la plana mayor de la UPCh, Ariel Cetina ha dicho que la universidad no es un negocio privado ni una agencia de colocación de funcionarios. Ha advertido que no dejará que grupos ajenos pongan en riesgo el legado de López Obrador como fundador de esta casa de estudios.

Para Cetina está claro que la UPCh es querida y respetada por todos los tabasqueños, por lo que seguirá apoyándola y defendiendo su autonomía. Ahora falta que los grupos políticos que buscan seguir controlando la universidad desde la clandestinidad dejen de tenerla como rehén de sus ambiciones.

La buena noticia es que Javier May, una vez en la silla de gobernador, llamará a cuentas y someterá al escrutinio público a los instigadores.

: LA RÚBRICA

Se han abierto ya las negociaciones sobre una posible declinación del perredista Juan Manuel Fócil en favor de la panista Lorena Beauregard en la candidatura al gobierno estatal. Aunque de entrada Fócil pidió que “sea al revés”, lo real es que de inmediato agregó: “Ya lo veremos”. Esto significa que analizará el caso, luego de que Marko Cortés, en su visita a Tabasco del fin de semana, pidiera al PRI y el PRD sumarse a Beauregard. Y tiene razón el panista: si los tres partidos no se unen se llevarán una soberana paliza, además de dar la imagen de desunión ante los electores. Como Xóchitl se desentendió del tema, Marko trata de poner orden. A ver si estos tontos y retontos de la oposición, empezando por el PRD, le hacen caso al dirigente nacional blanquiazul… El resultado de la elección a gobernador parece estar decidido de antemano en favor del morenista Javier May, quien ayer domingo registró su candidatura ante el IEPCT. En su discurso aseguró que Morena tendrá una victoria histórica en la entidad y prometió darle continuidad a la Cuarta Transformación. Dijo que el 16 de marzo vendrá Claudia Sheinbaum a su arranque de campaña en Paraíso, Comalcalco y Huimanguillo… También puede decirse lo mismo de la abanderada morenista a la alcaldía de Centro, Yolanda Osuna Huerta. De entrada, descarta que haya voto de castigo por buscar la reelección, ya que los ciudadanos apoyan su gestión. Y tiene razón. Encuestas por aquí y por allá le dan una enorme ventaja sobre el resto de los partidos políticos, la mayoría de los cuales están presentando candidaturas testimoniales, por mucho barullo que se haga en lo mediático. Y lo que son las cosas, siguen las campañas negras contra su postulación, mencionando que podría perder su candidatura por mil y un razones. Estos ataques no han hecho más que fortalecer su imagen ante una opinión pública sabedora de una guerra sucia con tintes misóginos. No aceptan que una mujer pueda tener éxito en la política tabasqueña, que se le valore en los altos mandos del partido y a ras de tierra.

Los cambios que Ariel Cetina Bertruy ha venido aplicando en la Universidad Popular de la Chontalpa, en diálogo con la comunidad universitaria, ha motivado la reacción de grupos externos que se resisten a dejar de lucrar políticamente con la casa de estudios. Con estas acciones desestabilizadoras retan también a Javier May, metiendo ruido en la zona de la Chontalpa, donde el morenista tiene una fuerte influencia política desde hace muchos años.

Bajo esos criterios, es insostenible la actitud de quienes buscan seguir controlando la universidad desde afuera, y con ello mantener los cotos de poder que durante lustros han tenido. Al hacerlo, ponen en evidencia un claro intento por desestabilizar a los Poderes Públicos del Estado y con ello someter a la segunda institución universitaria más importante de Tabasco.

En ‘radio pasillo’ de la UPCh se dice, se especula, que uno de los principales instigadores de esta trama sería el exrector Arquímedes Oramas Vargas, quien tras su gestión dejó como herencia una nómina con muchos allegados. En las redes sociales se comenta su patrocinio a los golpes mediáticos contra la UPCh y contra el rector. El propósito es seguir imponiendo a sus afines en puestos claves de la administración universitaria.

Oramas es un priista de la vieja guardia que ha buscado cobijo en otras siglas, sin tener éxito. Una de sus más desafortunadas historias es haber incumplido un compromiso político con Adán Augusto por el tema de la candidatura de alcaldía de Cunduacán para una familiar. A pesar de haber llegado al acuerdo de una candidatura por Morena, allá por 2018, al final aceptó una oferta similar del gobernador perredista Arturo Núñez, dejando con un palmo en la nariz al entonces candidato a la gubernatura. Es más, se comenta que los acuerdos políticos con Arturo Núñez siguen vigentes.

En los últimos años se le vio muy cerca del impresentable alcalde ‘independiente’ de Cunduacán, alias El Chelo Cano, con quien aparece en unas fotos junto a Mario Llergo y el exdirigente priista Adrián Hernández Balboa.

Las presuntas tretas del exrector han llegado al búnker del candidato morenista a la gubernatura, Javier May. Aquí se ha tomado como inadmisible la pretensión de engañar a la comunidad universitaria, usando la guerra sucia para imponer los intereses de un grupo político casi clandestino.

En algunas reuniones privadas con la plana mayor de la UPCh, Ariel Cetina ha dicho que la universidad no es un negocio privado ni una agencia de colocación de funcionarios. Ha advertido que no dejará que grupos ajenos pongan en riesgo el legado de López Obrador como fundador de esta casa de estudios.

Para Cetina está claro que la UPCh es querida y respetada por todos los tabasqueños, por lo que seguirá apoyándola y defendiendo su autonomía. Ahora falta que los grupos políticos que buscan seguir controlando la universidad desde la clandestinidad dejen de tenerla como rehén de sus ambiciones.

La buena noticia es que Javier May, una vez en la silla de gobernador, llamará a cuentas y someterá al escrutinio público a los instigadores.

: LA RÚBRICA

Se han abierto ya las negociaciones sobre una posible declinación del perredista Juan Manuel Fócil en favor de la panista Lorena Beauregard en la candidatura al gobierno estatal. Aunque de entrada Fócil pidió que “sea al revés”, lo real es que de inmediato agregó: “Ya lo veremos”. Esto significa que analizará el caso, luego de que Marko Cortés, en su visita a Tabasco del fin de semana, pidiera al PRI y el PRD sumarse a Beauregard. Y tiene razón el panista: si los tres partidos no se unen se llevarán una soberana paliza, además de dar la imagen de desunión ante los electores. Como Xóchitl se desentendió del tema, Marko trata de poner orden. A ver si estos tontos y retontos de la oposición, empezando por el PRD, le hacen caso al dirigente nacional blanquiazul… El resultado de la elección a gobernador parece estar decidido de antemano en favor del morenista Javier May, quien ayer domingo registró su candidatura ante el IEPCT. En su discurso aseguró que Morena tendrá una victoria histórica en la entidad y prometió darle continuidad a la Cuarta Transformación. Dijo que el 16 de marzo vendrá Claudia Sheinbaum a su arranque de campaña en Paraíso, Comalcalco y Huimanguillo… También puede decirse lo mismo de la abanderada morenista a la alcaldía de Centro, Yolanda Osuna Huerta. De entrada, descarta que haya voto de castigo por buscar la reelección, ya que los ciudadanos apoyan su gestión. Y tiene razón. Encuestas por aquí y por allá le dan una enorme ventaja sobre el resto de los partidos políticos, la mayoría de los cuales están presentando candidaturas testimoniales, por mucho barullo que se haga en lo mediático. Y lo que son las cosas, siguen las campañas negras contra su postulación, mencionando que podría perder su candidatura por mil y un razones. Estos ataques no han hecho más que fortalecer su imagen ante una opinión pública sabedora de una guerra sucia con tintes misóginos. No aceptan que una mujer pueda tener éxito en la política tabasqueña, que se le valore en los altos mandos del partido y a ras de tierra.