/ lunes 25 de febrero de 2019

CALMA CHICHA

En Tabasco, política y socialmente hay “calma chicha”, y no precisamente, porque todavía falta más de dos años, para las elecciones intermedias de 2021, sino porque la mayoría de los actores políticos están atenta y astutamente observando lo que hace y deja de hacer interna y externamente el gobierno de Adán Augusto López Hernández.

Digamos, que por ahora simple y sencillamente están fijándose y anotando las omisiones, las fallas y los errores.

El próximo jueves el actual gobierno cumple constitucionalmente dos meses de haber tomado las riendas del estado. En los que los escenarios - desgraciadamente- ha empeorado, sobre todo en los rubros de la inseguridad pública, empleo y economía.

No hay dinero, ni para comprar huevos, frijoles, leche, tortillas y pan. Cientos de negocios en terapia intensiva. La situación es verdaderamente angustiante, patética, terrible, critica, caótica, para el grueso de la población.

Y mire usted, que la gente le busca por todos lados, hacen su lucha con denuedo. El problema es que no hay inversión pública, ni privada y, por ende, no hay circulante. Y las obras significativas del gobierno en marcha son contadísimas.

Los dedos de las manos sobran, para contarla.

Si en marzo o abril la actual situación no toma un giro de 180 grados, Dios nos agarre confesado. Va a arder Troya.

Los tabasqueños, y avecindados aquí, no quieren escuchar más discursos huecos, más promesas oficiales, lo que les urge es que sus bolsillos tengan para comprar lo necesario, lo más elemental, aunque sea de a poquito.

Si políticamente no se ha complicado es por las expectativas o miedo o, como usted quiera llamarlo, que hay respecto a Andrés Manuel López Obrador y al propio Adán Augusto López Hernández, pero si no se da un cambio radical en lo inmediato, que atenúe la grave problemática económica, el descontento social va a hacer erupción.


“SQUOD SCRIPSI, SCRIPSI”

(LO ESCRITO, ESCRITO ESTÁ)

La disyuntiva que traía de cabeza al equipo de Adán Augusto López Hernández y a éste mismo, por fin se ha resuelto: Arturo Núñez Jiménez y Martha Lilia López Aguilera van a ser formalmente denunciados, procesados y penalizados. ¡No que no!

Y es que el ex góber le vio la cara a López Hernández, tal y como Andrés Rafael Granier Melo se la vio a él.

Si el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Jorge Alberto Aguirre Carbajal, continúa sin dar resultados tangibles, en menos de seis meses va a salir.

“Me canso ganso”, parafraseando al paisano.

La presión social diariamente sigue exponencialmente creciendo. Y cómo no, si en el transcurso de la pasada semana, mataron a una rezadora y al día siguiente a un pastor.

Un día antes que llegará el mismísimo Presidente Andrés Manuel López Obrador.

La delincuencia ya no respeta nada ni a nadie.

En Tabasco, política y socialmente hay “calma chicha”, y no precisamente, porque todavía falta más de dos años, para las elecciones intermedias de 2021, sino porque la mayoría de los actores políticos están atenta y astutamente observando lo que hace y deja de hacer interna y externamente el gobierno de Adán Augusto López Hernández.

Digamos, que por ahora simple y sencillamente están fijándose y anotando las omisiones, las fallas y los errores.

El próximo jueves el actual gobierno cumple constitucionalmente dos meses de haber tomado las riendas del estado. En los que los escenarios - desgraciadamente- ha empeorado, sobre todo en los rubros de la inseguridad pública, empleo y economía.

No hay dinero, ni para comprar huevos, frijoles, leche, tortillas y pan. Cientos de negocios en terapia intensiva. La situación es verdaderamente angustiante, patética, terrible, critica, caótica, para el grueso de la población.

Y mire usted, que la gente le busca por todos lados, hacen su lucha con denuedo. El problema es que no hay inversión pública, ni privada y, por ende, no hay circulante. Y las obras significativas del gobierno en marcha son contadísimas.

Los dedos de las manos sobran, para contarla.

Si en marzo o abril la actual situación no toma un giro de 180 grados, Dios nos agarre confesado. Va a arder Troya.

Los tabasqueños, y avecindados aquí, no quieren escuchar más discursos huecos, más promesas oficiales, lo que les urge es que sus bolsillos tengan para comprar lo necesario, lo más elemental, aunque sea de a poquito.

Si políticamente no se ha complicado es por las expectativas o miedo o, como usted quiera llamarlo, que hay respecto a Andrés Manuel López Obrador y al propio Adán Augusto López Hernández, pero si no se da un cambio radical en lo inmediato, que atenúe la grave problemática económica, el descontento social va a hacer erupción.


“SQUOD SCRIPSI, SCRIPSI”

(LO ESCRITO, ESCRITO ESTÁ)

La disyuntiva que traía de cabeza al equipo de Adán Augusto López Hernández y a éste mismo, por fin se ha resuelto: Arturo Núñez Jiménez y Martha Lilia López Aguilera van a ser formalmente denunciados, procesados y penalizados. ¡No que no!

Y es que el ex góber le vio la cara a López Hernández, tal y como Andrés Rafael Granier Melo se la vio a él.

Si el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Jorge Alberto Aguirre Carbajal, continúa sin dar resultados tangibles, en menos de seis meses va a salir.

“Me canso ganso”, parafraseando al paisano.

La presión social diariamente sigue exponencialmente creciendo. Y cómo no, si en el transcurso de la pasada semana, mataron a una rezadora y al día siguiente a un pastor.

Un día antes que llegará el mismísimo Presidente Andrés Manuel López Obrador.

La delincuencia ya no respeta nada ni a nadie.