/ lunes 28 de enero de 2019

Seguridad: estrategia de reacción ¿sin investigación?

¿Qué ha cambiado de la estrategia de seguridad implementada por la anterior administración a la actual en 27 días?

Una mayor presencia de unidades en las calles y avenidas de Villahermosa con sirenas encendidas como -vieja estrategia- de disuasión e inhibición para la delincuencia en comisión de delitos desde robo común hasta alto impacto.

También se incrementó el combustible para recorridos de patrullas carencia de la que se quejaron en el pasado con la denuncia que vales de gasolina se concentraban en jefes y no en la tropa, responsable de transitar calles para garantizar la seguridad pública.

Pero, la escalada de inseguridad y violencia parece incontenible en la medida que redes sociales y medios de comunicación difundan información fidedigna sobre “el éxito” en la incursión de grupos y personas que cometieron ilícitos –como el asalto al banco por comando de ocho personas encapuchadas- sin que exista un detenido, no solo aumenta las posibilidades de un segundo, tercer y cuarto intento de quienes lograron su cometido, sino que incentiva a otros a realizarlos, aunque suene “criminal” afirmarlo.

En otras palabras: impunidad de hechos criminales perpetrados son el mejor incentivo para los delincuentes.

¿Qué ha funcionado en la estrategia de seguridad, cuál es la diferencia con anteriores, prevención, sanción, castigo?

Los cazadores van por sus presas al sitio preciso, ningún cazador furtivo caza venados en la urbe o donde no hay animales de esa especie, premisa elemental.

Solo en Centro están identificadas colonias, calles donde podrían entrar y atacar a fondo la inseguridad, aunque no existe un plan de investigación determinado, incluso sospecha de colusión y protección oficial.

Mientras no cambie, cualquier estrategia con las mismas personas al frente tendrá iguales resultados.

El gobernador Adán Augusto López Hernández reconoció la compleja realidad para recuperar la seguridad perdida que como aunado a la crisis económica se recrudeció.

El reconocimiento de un gobernante a las dificultades que representa el combate a la inseguridad podría ser una señal de debilidad individual del representante máximo del gobierno en la realidad es una advertencia, a instituciones, a cuerpos de seguridad y a la sociedad sobre los límites y los alcances en esta nueva etapa.

CONTORNO

Diálogos callejeros y recados al gobernador

Caminar sin guaruras y con un relajado equipo de seguridad de parte del gobernador Adán Augusto López Hernández permite a muchos entrar en contacto con él y algunos de sus más cercanos colaboradores.

Tiene pros y sus contras: en logística, ejemplo, el viernes pasado, durante la ceremonia de inauguración de una estación de servicio, pese a la presencia de casi un centenar de personas la gasolinera estuvo despachando combustibles, que debe estar prohibido si se atiene a lo que marcan protocolos en materia de protección civil y de seguridad energética en todo el mundo.

Caso aislado. También se escuchan otros diálogos y aquí unos cuantos de ese día dedicados al gobernador y que recibió uno de sus más cercanos colaboradores.

El que recibe el gobernador, pero no el secretario:

Se identifica como un empresario del sector energético “…dígale al gobernador que el secretario de la Vega (José Antonio) no me ha recibido he ido desde el lunes hasta ayer (jueves) y está muy ocupado o anda en eventos” Guillermo X le recuerda al interlocutor que el propio gobernador le recibió en su despacho el lunes anterior para mandarlo con su secretario.

El acosador:

“Yo soy el acosador, porque siempre ando buscando una plática dile al gobernador que solo necesito 20 minutos para exponer el proyecto que traigo” te ubico perfectamente y le digo, le responde.

El funcionario que no soporta más recomendados:

“voy a un recorrido a la obra para que le digas y (entre risas) entre eso y las recomendaciones de un diputado (…) para darle trabajo a su gente ya ni sé”.

¿Qué ha cambiado de la estrategia de seguridad implementada por la anterior administración a la actual en 27 días?

Una mayor presencia de unidades en las calles y avenidas de Villahermosa con sirenas encendidas como -vieja estrategia- de disuasión e inhibición para la delincuencia en comisión de delitos desde robo común hasta alto impacto.

También se incrementó el combustible para recorridos de patrullas carencia de la que se quejaron en el pasado con la denuncia que vales de gasolina se concentraban en jefes y no en la tropa, responsable de transitar calles para garantizar la seguridad pública.

Pero, la escalada de inseguridad y violencia parece incontenible en la medida que redes sociales y medios de comunicación difundan información fidedigna sobre “el éxito” en la incursión de grupos y personas que cometieron ilícitos –como el asalto al banco por comando de ocho personas encapuchadas- sin que exista un detenido, no solo aumenta las posibilidades de un segundo, tercer y cuarto intento de quienes lograron su cometido, sino que incentiva a otros a realizarlos, aunque suene “criminal” afirmarlo.

En otras palabras: impunidad de hechos criminales perpetrados son el mejor incentivo para los delincuentes.

¿Qué ha funcionado en la estrategia de seguridad, cuál es la diferencia con anteriores, prevención, sanción, castigo?

Los cazadores van por sus presas al sitio preciso, ningún cazador furtivo caza venados en la urbe o donde no hay animales de esa especie, premisa elemental.

Solo en Centro están identificadas colonias, calles donde podrían entrar y atacar a fondo la inseguridad, aunque no existe un plan de investigación determinado, incluso sospecha de colusión y protección oficial.

Mientras no cambie, cualquier estrategia con las mismas personas al frente tendrá iguales resultados.

El gobernador Adán Augusto López Hernández reconoció la compleja realidad para recuperar la seguridad perdida que como aunado a la crisis económica se recrudeció.

El reconocimiento de un gobernante a las dificultades que representa el combate a la inseguridad podría ser una señal de debilidad individual del representante máximo del gobierno en la realidad es una advertencia, a instituciones, a cuerpos de seguridad y a la sociedad sobre los límites y los alcances en esta nueva etapa.

CONTORNO

Diálogos callejeros y recados al gobernador

Caminar sin guaruras y con un relajado equipo de seguridad de parte del gobernador Adán Augusto López Hernández permite a muchos entrar en contacto con él y algunos de sus más cercanos colaboradores.

Tiene pros y sus contras: en logística, ejemplo, el viernes pasado, durante la ceremonia de inauguración de una estación de servicio, pese a la presencia de casi un centenar de personas la gasolinera estuvo despachando combustibles, que debe estar prohibido si se atiene a lo que marcan protocolos en materia de protección civil y de seguridad energética en todo el mundo.

Caso aislado. También se escuchan otros diálogos y aquí unos cuantos de ese día dedicados al gobernador y que recibió uno de sus más cercanos colaboradores.

El que recibe el gobernador, pero no el secretario:

Se identifica como un empresario del sector energético “…dígale al gobernador que el secretario de la Vega (José Antonio) no me ha recibido he ido desde el lunes hasta ayer (jueves) y está muy ocupado o anda en eventos” Guillermo X le recuerda al interlocutor que el propio gobernador le recibió en su despacho el lunes anterior para mandarlo con su secretario.

El acosador:

“Yo soy el acosador, porque siempre ando buscando una plática dile al gobernador que solo necesito 20 minutos para exponer el proyecto que traigo” te ubico perfectamente y le digo, le responde.

El funcionario que no soporta más recomendados:

“voy a un recorrido a la obra para que le digas y (entre risas) entre eso y las recomendaciones de un diputado (…) para darle trabajo a su gente ya ni sé”.