Refirió que quienes sí deberán presentarse a trabajar, el lunes 1 de junio, son los que conforme a las necesidades de cada área, sus funciones y bajo estrictas medidas de prevención, “ya venían trabajando en las oficinas; ese es el personal que deberá continuar presentándose”.
Óscar Palomera destacó la importancia de la labor que han venido desempeñando las plantillas de la Secretaría de Salud, la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, la Comisión Estatal de Agua y Saneamiento, y el Instituto de Protección Civil del Estado, que por la naturaleza de sus funciones y con plena responsabilidad, no han detenido sus tareas.
Los lineamientos para la Nueva Normalidad de las Actividades en la Administración Pública del Estado elaborados por la SAIG, determinan una segmentación de la población laboral: los de riesgo bajo o poco vulnerable y la de riesgo alto y vulnerable.
Los primeros son aquellos que no tienen antecedentes de enfermedades crónicas no transmisibles, no presentan problemas en el sistema inmunológico y son menores de 60 años, mientras que los de alto riesgo son quienes tienen más de 60 años, las mujeres embarazadas, o las personas que padecen hipertensión arterial, diabetes, enfermedad cardíaca o pulmonar crónica, insuficiencia renal o hepática, y obesidad mórbida.
Para el retorno a la normalidad laboral, se establecen 11 medidas temporales que deben acatarse de acuerdo con una semaforización que va de rojo a naranja, amarillo y verde, estableciendo en cada fase una serie de restricciones y recomendaciones.
Determina que sólo cuando Tabasco alcance la semaforización verde se reanudarán las actividades al cien por ciento en la administración estatal, aunque persistirán medidas sanitarias, como el uso obligatorio de equipo de protección personal (cubrebocas), la limpieza y desinfección periódicas en áreas de trabajo, y se dará prioridad al uso de las TIC para la simplificación administrativa en trámites gubernamentales.