Ricardo Martínez Estrada, presidente de la asociación de jubilados de las secciones 125 y 205 del Sindicato Único de Trabajadores Electricistas de la República Mexicana (SUTERM), denunció este día el abuso, la prepotencia, la soberbia y la inconsciencia humana del recién nombrado Secretario General del Sindicado, Ramndyri Iery Hernández, que por causas inexplicables, ordenó el desalojo y cierre de las oficinas que ocupaba al servicio de los trabajadores de la tercera edad.
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Con un poco más de 78 afiliados, el ex diputado Martínez Estrada acusó de la inconsciencia del nuevo dirigente a quien exigió saber cuál es la envidia, la ambición, del porqué de su actuar, cuando en realidad, debe aplicar que como representante sindical -no líder- debe dialogar, apoyar, y ayudar, no actuar de forma inhumana e inconsciente en agravio de los trabajadores de la tercera edad, de los jubilados.
Lo que se pide es trabajar y ayudar a los jubilados; la actitud asumida del nuevo dirigente está mal, de hecho hay hijos de jubilados que no ven bien su actuar, están molestos.
Legalmente hay derechos adquiridos
Miguel Martínez Pérez, representante jurídico de los jubilados, comentó a pregunta de reporteros, sobre el retiro de las oficinas que ocupan ahí en las instalaciones del SUTERM, ubicadas en la colonia primera de mayo, dijo que no tienen porqué dejarlas: “legalmente hay derechos adquiridos; durante muchos años hay una posesión; entonces, básicamente en el derecho, tu vas a reclamar tu derecho como posesionario, porque evidentemente hay una parte del atropello tan grande que está existiendo contra las personas de la tercera edad”.
Abundó que si en estos momentos, en caso de darse algún fallecimiento de un jubilado, hay que actualizar los seguros de vida y resulta que la documentación está secuestrada, ante el cierre sorpresivo de la oficina asignada al representante, en este caso a don Ricardo Martínez.
Se están cometiendo atropellos, violentando flagrantemente un delito en contra de las personas de la tercera edad, sus derechos humanos. Quitarnos las instalaciones -se abunda- no procede: “bo está escrito; no le asiste la razón de derecho en quitarlo, ni le existe la razón del derecho en cederlo, no hay tal ; no está escrito, no hay un estatuto en la cual se especifique que este edificio es posesionario el nuevo sindicato, al nuevo líder sindical, no, es de los trabajadores”.
Si la cuestión son las cuotas que en efecto se dejaron de pagar, pues nos actualizamos, pagamos -dice Martínez Estrada-; desde el día 17 de diciembre pasado que fue la elección del nuevo líder de la SUTERM comenzó la prepotencia de Ramndyri Iery, y pues, estamos abierto al diálogo y pues, que, como principio de cuentas, abra la oficina que cerró con sus candados y se proceda a las pláticas de que es lo que se quiere hacer.
