Las celebraciones del Día del Abuelo, como algunas otras fechas especiales, siempre muestran otra cara relacionada con los festejos.
Y es que mientras hubo quien se dio su tiempo para recordar a sus abuelos y personas de la tercera edad, hay otros casos donde los adultos mayores no tuvieron la misma fortuna. Tal es el caso de don Miguel, que a sus 75 años, sus nietos e hijos no lo han visitado durante años.
Esta persona de la tercera edad normalmente deambula por las zonas del mercado público José María Pino Suárez y el centro de Villahermosa, pidiendo limosnas y un poco de comida para sustentarse en el día.
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Desde hace algunos años sus hijos se fueron a trabajar al norte y desde entonces no los ve y ni siquiera ha recibido noticias de ellos. Lo peor del caso es que tampoco sus hijos se han preocupado por buscarlo y enviarle algún apoyo para su manutención.
Por ello, para muchas personas como don Miguel, este domingo fue uno de tantos y no tuvo nada de especial, aunque esperan con ansias que alguien se acuerde de ellos.
