Comalcalco, Tabasco.- Su intento de asalto a mano armada falló. El delincuente, dedicado al presunto robo de motocicletas, no vio lo duro sino lo tupido; tan tupido que fue a parar a algún centro hospitalario de este municipio o el aledaño, Cunduacán.
Miguel “N”, nombre de este sujeto, fue brutalmente golpeado hasta con palos y machetes por una turba enfurecida de vecinos de la zona conocida como “La Raya”, misma que divide los municipios de Cunduacán y Comalcalco, hechos ocurridos en días pasados, pero que se hizo viral luego de que se popularizara el video del asaltante de combi que fue sometido por los pasajeros.
Golpes con puños, patadas, palos y machetes y una que otra pedrada, fueron las que recibió este hombre tras su fallido asalto a mano armada en contra de una pareja que viajaba en su motocicleta; se dice que otro tipo que le acompañaba, -su cómplice- pudo escapar.
Los gritos de ayuda, de perdón, de auxilio, se fueron perdiendo durante la paliza que recibía este hombre, dedicado presuntamente a robar; fue prácticamente masacrado. La turba no entendió más de que era un ratero; un asaltante; un delincuente; un hampón, que en su caso, arremetería sin piedad contra su víctima para despojarlo de sus prendas de valor.
Fue por ello que nadie tuvo compasión para con este asaltante; iba a ser colgado, pero se dice que apareció la policía y lo rescató.
En redes sociales un video daría a conocer el ataque contra este sujeto que acusó ser de la comunidad Villa Aldama durante el duro cuestionamiento ciudadano; confesó dedicarse a robar con violencia motocicletas, pero que era su primera vez; nadie le creyó.
Confesó también de que las motos que roba –según en su primera vez-, las llevaba a vender a un tal “Guaco”, avecindado en la ranchería Arena en su primera sección; la gente supondría que la policía se encargaría de hacer las investigaciones de competencia y verificar la versión del golpeado.
El presunto delincuente, se dijo, acabó en poder de la policía que posiblemente lo trasladó a un centro médico para su atención, desconociéndose en qué cabecera municipal, Cunduacán o Comalcalco. Lo que sí fue un evidente hecho y mensaje para ladrones, es que la ciudadanía, está cansada con tantos atracos en la zona y que seguirán los linchamientos.
