Familia de Samarkanda va a prisión por agredir a enfermera

Madre e hijos arremetieron contra la profesionista al argumentar que podría contagiarlos de Covid-19

Héctor Andrés Trinidad | El Heraldo de Tabasco

  · miércoles 29 de julio de 2020

Mariana “N” de 50 años de edad y sus hijos Martín y Manuel, de 19 y 23 años de edad, deberán permanecer alejados de la víctima. Foto: FGE

Una mujer y sus dos hijos, que al inicio de la pandemia por aparente miedo a contraer el Covid-19 amenazaron y golpearon a una enfermera, su vecina, al grado de exigirle se fuera a vivir a otra parte, fueron detenidos ayer por la policía ministerial y llevados a la prisión del estado al ser acusados del delito de lesiones en pandilla.

Los acusados, identificados como Mariana “N” de 50 años de edad y sus hijos Martín y Manuel, de 19 y 23 años de edad, respectivamente, obtendrían horas más tarde el beneficio de la libertad bajo caución, aunque quedando sujetos a proceso y que semanalmente deberán presentarse a firmar y de que no tengan contacto alguno con la afectada, pues en caso de hacerlo, serían objetos de una violación que ameritaría sanciones.

Las órdenes de captura de esta familia se llevaron a cabo en el poblado Samarkanda, cerca de sus domicilios, luego que el juez de control las concediera al encontrar clara evidencia del ataque inconsciente de estas personas contra la trabajadora de salud.

En la causa penal 212/2020 la enfermera de profesión, de quien se omitieron sus generales, denunció con oportunidad las agresiones físicas y verbales a las que fue objeto por parte de esta familia bajo el argumento de posibles contagios del Covid; posterior a ser golpeada le pidieron que no regresara a su vivienda porque supuestamente estaba contagiada.

La autoridad actuante, con oportunidad integró la carpeta de investigación donde anotó la valoración médica y dio a la víctima apoyo psicológico y se dictaron medidas de protección para evitar que se repitieran los hechos.

El Juez de Control de la Región Judicial 6 con oportunidad ordenó la aprehensión en contra de los responsables a quienes en prisión se dictó auto de vinculación a proceso con la medida cautelar de firma periódica y ordenando que no tengan contacto con la víctima, dejando en claro que la violación de estas ameritaría sanciones.