Ante la situación que se vive en el estado por la balacera y los autos incendiados, negocios en Cárdenas, Cunduacán y Huimanguillo tuvieron que cerrar para salvaguardar la integridad de su personal.
Comercios de diferentes giros se vieron afectados al no poder realizar su labor de venta, ya que la violencia que se estaba viviendo era un peligro para los trabajadores y clientes.
En redes sociales, los cibernautas mencionaron que abarroteras estaban cerradas en Cárdenas, y la gente tenía temor de salir.
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Además de la citada demarcación, en Huimanguillo y Cunduacán los establecimientos bajaron cortinas; los reportes de autos incendiados aumentaban la zozobra entre los ciudadanos de estos municipios.
Pese a la situación, algunas personas tuvieron que salir para realizar alguna diligencia, al mismo tiempo, los reportes de unidades envuelta en llamas continuaban.
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Aparte de los negocios cerrados, no había transporte en algunas zonas de los municipios referidos, y las personas pedían a los que transitaban por lugares donde se reportaron unidades quemadas circular con cuidado.
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Cabe señalar que los primeros informes, mencionaron que los actos violentos comenzaron alrededor de las 7 de la mañana.
En algunos lugares se escucharon disparos, que fueron confundidos con cohetes, pero después se supo que eran detonaciones.
