De tener una participación del 3 por ciento del Producto Interno Nacional (PIB) hasta antes de 2017, Tabasco registró al cierre del 2018 un PIB de menos 10.6 por ciento, siendo el estado de menor participación federal, lo que acentuó aún más la crisis económica que venía arrastrando y que alcanzó uno de sus puntos álgidos en 2014, cuando se perdieron más de 70 mil empleos producto de la debacle petrolera.
Con ese escenario, era evidente un inicio incierto de este 2019, y en opinión del Colegio de Economistas de Tabasco los primeros signos de recuperación con el arranque del proyecto de la nueva refinería de Dos Bocas se estarían sintiendo hacia finales de este año, lo que hace ver todavía un panorama difícil en los últimos meses.
El presidente de este Colegio de Profesionistas, Gildardo López Baños, reconoció que de entrada el cambio de administraciones, tanto federal como local hacía complicado el arranque del primer trimestre en donde la propia Secretaría de Finanzas reconoció algunos subejercicios
“Todo inicio de gobierno en condiciones normales tienen algunos detalles para organizar en el primer semestre, en el caso de Tabasco es un caso especial, la situación económica del estado de Tabasco nos trae problemas serios desde el 2007, cuando se hace una modificación a la Ley de Coordinación fiscal, y uno de los estados perdedores de los recursos que recibía de la federación es Tabasco, porque se modifican los indicadores para obtener recursos, empieza a tomarse en cuenta a partir de esa época el número de población como un factor determinante y la aportación al PIB se rezaga en ese sentido”, aseveró.
Aunado a ello, vino la crisis petrolera que hizo que todas las empresas que antes tenía trabajando Pemex se retiraron de Tabasco. “al retirarse de Tabasco en el 2014, empezó a sentirse ese efecto y se presentó el fenómeno de despido laboral sumado al despido de las plataformas de Campeche, donde muchos eran tabasqueños y la situación se volvió critica”.
López Baños dijo que de esa fecha a la actualidad, uno de los indicadores que ha ido en picada es la generación de empleo, ya que el decrecimiento del PIB de la entidad tuvo un efecto en cadena; “Al retirarse las empresas, al haber desempleo, empezaron a cerrar comercios, muchas pequeñas y medianas empresas que estaban aquí empezaron a cerrar porque ya el consumo que venían trayendo ya no se mantenía, esto complica las aportaciones que nos da la federación porque si antes el estado participaba con el 3.5 del PIB nacional, eso le permitir una aportación nacional, pero el IVA y el Impuesto sobre Producto del Trabajo se vinieron abajo e hizo decrecer nuestra participación, que ya desde el 2010 se siente como la modificación a la Ley de Coordinación Fiscal ya nos afectaba, con esta crisis nos afectó más”, estableció.
Indicó que al día de hoy se siguen sintiendo los efectos de este proceso, además de que los subejercicios son algo normal en una economía normal, porque muchas veces el ejercicio de recursos implica realizar muchos procesos como licitaciones.
El economista mencionó que la actual administración recibió a la entidad con un PIB de menos 10.6 por ciento, con lo cual cerró el 2018, siendo Tabasco el estado que encabeza el decrecimiento del PIB en el 2018, y curiosamente Chiapas y Campeche son también parte de los estados que están en esa dinámica de decrecimiento de su PIB, aunque Veracruz por tener diversificada su economía con actividades de este tipo, este indicador no se vio afectado.
“Este decrecimiento fue fundamentalmente por el sector secundario, ya que en el sector primario Tabasco cerró en el 2018 con un crecimiento de 4.7 , sin embargo, en el sector secundario tuvo un decrecimiento del 16.4, y el sector terciario tuvo también un crecimiento de menos 6.2; con ello seguimos encabezando el decrecimiento del PIB, pero no es una varita mágica la situación económica, la economía de Tabasco quedó como una economía destrozada, como si hubiera habido una guerra, los sectores contraídos, un desempleo tremendo, cuando se inicia el proceso de la reforma energética, se registraron más de 70 mil desempleados en un año, ante esta situación se tiene que redefinir todo un esquema, un nuevo modelo, creo que la actual administración lo está realizando, y a fin de año, en los dos trimestres que quedan se van a empezar a reducir estas tendencias”, estimó.
Por su parte, el secretario de Finanzas, Said Mena Oropeza, dio a conocer que en lo que va del año han arribado 14 mil millones de pesos de recursos del presupuesto federal, mismos que se han ejercido en tiempo y forma.
Asimismo, dijo que en materia de ingresos propios se ha recaudado 60 por ciento de los 2 mil millones de pesos que se tenían presupuestados como recursos estatales.
De este modo, consideró que no se esperan sobresaltos en lo que resta del año, sino por el contrario, el arranque de obras como la refinería hacen vaticinar un mejor desarrollo en el mediano plazo.
