De acuerdo con la Comisión Estatal de Agua y Saneamiento (CEAS), las plantas potabilizadoras de agua a su cargo han sufrido diversas problemas relacionadas con la energía eléctrica, fallas en la planta o en la administración del inmueble que han hecho que se deje de suministrar agua a la población, en algunos de ellos como es la planta de Chichicastle ha estado sin funcionar 27 meses en los últimos seis años, mientras que la de Boca del Cerro ha dejado sin agua durante tres meses a la población durante el año 2024, la planta de Estapilla no funcionó 2 meses en 2019 y la Oxolotán ha dejado sin agua a las comunidades cercanas durante el mes de marzo del presente año.
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Según la CEAS, las 19 plantas potabilizadoras a cargo del gobierno del estado han presentado algún problema que las ha dejado sin funcionar por algún periodo de tiempo en los años que lleva la actual administración morenista. Estos problemas son atribuibles, de acuerdo al reporte de la dependencia a cargo de Armando Padilla Herrera, a fallas en el suministro de energía eléctrica, fallas en la planta o del personal que opera la planta dejando de trabajar por algunas horas o por días completos.
Sin embargo, la Planta de Chichicastle ubicada en el municipio de Centla es la que más tiempo ha pasado sin funcionar en esta administración de gobierno. De acuerdo a los datos proporcionados a esta casa editorial, esta planta dejó de funcionar en septiembre del 2020, en plena pandemia del Covid19 cuando se recomendaba el lavado de mano constante, los vecinos de esta planta que los surte de agua potable dejaron de recibir el preciado líquido durante los meses de septiembre, octubre, noviembre y diciembre de ese año.
La situación de falta de agua en esta zona del estado continuó durante todo el 2021 y 11 meses del 2022, funcionando solo el ultimo día del mes de noviembre de ese 2022 y en diciembre de ese año solo dejó de funcionar 2 días y con altas y bajas en los días que esta planta provee de agua a los pobladores, en febrero del 2023 solo funcionó 9 días de ese mes, y en el mes de marzo de este 2024 la planta que provee a miles de personas de la zona indígena del estado, no funcionó un solo día.
Otra de las plantas potabilizadoras que han presentado problemas en su funcionamiento por meses es la de Boca del Cerro, que empezó a presentar problemas en diciembre del 2023 cuando solo surtió de agua potable a las comunidades cercanas durante cuatro días. La situación empeoró en enero del 2024 cuando la planta no envió una sola gota de agua a las casas cercanas, situación que continuó en febrero y marzo de este año, fecha de corte del reporte de la dependencia estatal entregado a El Heraldo de Tabasco.
Esta situación se ha repetido en la planta Estapilla de Tenosique que dejó de trabajar dos meses en el 2019, mientras que las plantas de Huimanguillo y Oxolotán ha dejado sin agua por un mes a sus vecinos, el primero en el 2023 y la segunda en marzo de este 2024, aunque las fallas en esta última planta empezaron en febrero de este año cuando solo trabajo dos días de ese segundo mes de este año.
