Un pequeño dolor de garganta, temperatura y dolor de huesos, alertaron y orillaron a Pedro Luis Gutiérrez Jiménez a realizarse la prueba rápida para detectar Covid-19.
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Aprovechando la estancia en el módulo de Ciudad Deportiva su esposa Zaira Álvarez López también se la practicó, pero la sorpresa y el temor se apoderaron de la pareja cuando los resultados arrojaron que ambos son positivos. Temor porque su pequeña de cuatro años, Elda María, que hasta ahora ha logrado librar la enfermedad, podría contagiarse en cualquier momento en su propia casa.
Provenientes de la ranchería Guineo primera sección de Centro, donde residen, se formaron desde las siete de la mañana en la larga fila y fue hasta pasado el mediodía que pasaron a realizarse la prueba. Muy preocupados salieron del módulo debido a que el personal médico solamente se limitó a decirles que acudieran a un centro de salud, mas no les dieron alguna recomendación.
"No nos dijeron qué hacer en este caso, si nos tenemos que aislar, nada", dijo al tiempo de señalar que irían al hospital "Dr. Maximiliano Dorantes" a solicitar información. Además, Gutiérrez Rodríguez externó su preocupación porque de someterse al aislamiento tiene que pedir unos días en la empresa donde labora como encargado de almacén y teme perder su trabajo dado que sus jefes son muy estrictos.
"De hecho no me querían dar permiso para venir a la prueba, me dijeron, rapidito y ya estás de vuelta; voy a reportarme a ver qué me dicen", indicó. Incluso, señaló que apenas han logrado ponerse la primera dosis de la vacuna contra el SARS-COV-2, precisamente porque en su trabajo no habían querido darle "chance" para hacerlo.
