Comalcalco.- Habitantes de la ranchería José María Pino Suárez se plantaron ayer frente al palacio municipal para exigir se respete la voluntad de la población, y se elija democráticamente al delegado.
La alcaldesa, Lorena Méndez Denis, ordenó cerrarán policías el acceso principal y se negó a dialogar con los inconformes.
Incluso llegó una camioneta de soldados.
Con pancartas llegaron los plantonistas al Ayuntamiento y sitiaron el lugar, ante la cerrazón de las autoridades a escucharlos.
Los inconformes dijeron que por la supuesta imposición de delegado municipal en esa comunidad hay problemas, por ello, demandaron que saquen las manos y permitan que elijan libremente.
Al final, se formó una comisión y entraron a platicar.