Abandonados y dejados a su suerte es como se han mantenido por largo tiempo los dos miradores más importante de Villahermosa, la Torre del caballero en las Gaviotas y Mirador de las Águilas en el parque Tomás Garrido.

Dos de los espacios que podrían ser aprovechados por el turismo que llega a la capital del estado, han sido abandonados y poco a poco se han ido dañando ante la falta del mantenimiento.

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En el caso de la torre del Caballero actualmente se encuentra cerrado debido a que se contempla mantenimiento dentro de las obras del Malecón aunque nunca se ha dicho que tipo de mejoras tendrá dicho mirador.

Desde hace tiempo, el olor a orina es algo característico cuando se sube a la parte alta ya que la vigilancia ha sido mula. Hace un par de años uno de los cristales fue despedazado y a la fecha una lona ha sido la única protección dejando un espacio que podría ser de mucho peligro.

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Por su parte el mirador de Las Águilas en el parque Tomás Garrido Canabal lleva seis años cerrado al público y la explicación de las autoridades es que por seguridad fue cerrado a los visitantes.

Dicho discurso es el mismo que se ha mantenido desde hace poco más de dos trienios.

Recientemente , las autoridades municipales han permitido a distintas empresas de Turismo de aventura utilizar el mirador de las Águilas pero una vez que terminan sus actividades se cierra al público.

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Así ambos miradores solo ven pasar el tiempo sin que llegue una remodelación efectiva que permita a la ciudadanía vivir la experiencia de apreciar la ciudad de Villahermosa desde lo alto.

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