Laura es una jovencita con discapacidad física, mental y visual, a quien recientemente le diagnosticaron piedras en la vesícula, por lo cual requiere de una cirugía; sin embargo, su familia es de escasos recursos y no cuenta con los medios para practicársela.
Hija biológica de Elda Acopa, la muchacha vive con sus familiares en la calle Vicente Suárez, que da a la colonia Indeco, en una humilde vivienda de lámina, en donde se realiza la venta de pozol, dulce de coco y hielo, que es la fuente de ingresos de la familia.
El esposo de su mamá, de nombre Isidro Olán, platicó con El Heraldo de Tabasco acerca de la situación que enfrentan con la enfermedad de la joven de 29 años, a quien ama como si fuera su hija.
“Laura es una muchacha discapacitada física, mental y visual, y ahora después de hacerle unos estudios, sucede que su vesícula tiene piedras. Entonces, en los laboratorios nos dijeron que necesita de una cirugía, pero nosotros somos de escasos recursos y realmente no contamos con dinero para ello”, señaló don Isidro.
El hombre que está próximo a cumplir 60 años, no encuentra empleo desde los 50, y por tal motivo no tiene ningún tipo de seguridad social que permita que su hija sea operada. “Aquí sobrevivimos haciendo ventecitas; vendemos pozol en casa, y yo cuando hay oportunidad salgo a vender, y digo oportunidad porque ahorita en tiempo de lluvia vendo poco, y pues vivimos al día, la verdad”, dice el angustiado padre.
Ante la falta de recursos y seguridad social, la joven es atendida por los médicos de las Farmacias Similares, en cuyos laboratorios también le practicaron los estudios del hígado; aún falta practicarle una biometría hemática, para determinar cómo se encuentra su sangre y determinar si es posible la cirugía dadas sus condiciones de salud.
Don Isidro y su esposa se percataron del problema de Laura porque su piel se tornó de color amarillo; ella no habla y sólo alcanza a decir “me duele”. En un principio, sus padres pensaron que su problema era hepatitis, motivo por el cual fue llevada al médico: “solicitaron los estudios, pero no es la hepatitis en sí, es el problema que tiene de las piedras en la vesícula que le ocasionaron ese asunto, ahorita ya está estable, está bien, ya los dolores ya cesaron porque le dieron un tratamiento, pero lo que urge es sacarle esas piedras porque son las que le están haciendo mucho daño, según le dijeron a mi esposa”, señala.
Debido a la falta de recursos económicos, don Isidro y doña Elda en un inicio habían pensado en recurrir a remedios naturistas; aún no han cotizado el costo de la operación en hospitales públicos o privados. En estos momentos se encuentran juntando el dinero necesario para realizar el estudio de biometría hemática, por lo cual apelan a la bondad de los ciudadanos para que les apoyen en este difícil trance.
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Si deseas aportar apoyo económico para la operación de Laura, puedes hacerlo a la tarjeta 4027 6660 2624 1488, de Banco Azteca
