El comercio ambulante prácticamente ha secuestrado las banquetas de Villahermosa y las autoridades no han hecho nada.
A nueve meses de la llegada de la actual administración municipal el comercio informal se ha multiplicado considerablemente por distintas zonas.
Uno de los puntos que está fuera de control es en la calle Hermanos Bastar Zozaya zona donde los vendedores ambulantes se han expandido hasta la calle.
En un recorrido realizado por El Heraldo de Tabasco se pudo constatar que los transeúntes prefieren caminar por la calle que pasar en reducidos espacios.
La obstrucción de la vía pública ha imposibilitado el paso de ciudadanos que tienen la necesidad de pasar por la zona con carriolas o muletas.
En la calle Madero, fue soldada una estructura metálica de casi cinco metros por lo que los transeúntes se quedan sin la posibilidad de poder pasar y se tienen que dar la vuelta sobre la calle para poder acceder a la acera.
Con el paso de los meses, pese a que las autoridades municipales han hecho mucho ruido sobre las acciones emprendidas para tomar el control, cada día crece el ambulantaje en la ciudad.
Otros lugares con similar situación se encuentra en la avenida Francisco Javier Mina, donde la venta de tacos y chácharas se ha apoderado de toda la banqueta, desde la terminal de una conocida empresa de transporte hasta la esquina de Bastar Zozaya.