La avenida Francisco I. Madero en la capital tabasqueña presenta fugas de agua desde hace más de 15 días cuando la rehabilitaron.
Los comerciantes manifiestan que fue a raíz de la pavimentación del tramo de Madero hacia Hermanos Bastar Zozaya que el problema se agravó.
Conforme pasan las horas el daño va creciendo y algunos ante la necesidad tienen que colocar botes para no mojarse.
Imágenes captadas con el reportero gráfico de esta casa editorial muestran que el agua ocupa gran parte de la vialidad, a simple vista da la impresión que la calle está mojada por las lluvias, sin embargo esto no es así, la presencia del líquido se debe al desperfecto. Una combi estacionada está en medio de este gran charco y a poca distancia el tráfico vehicular.
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Un vendedor de aguas frescas dentro de este “río” improvisado, se observa. Pese a que esta sustancia negra es abundante. el comerciante está en una actitud tranquila, como si la presencia del medio acuoso no existiera.
Las banquetas con la humedad son otra consecuencia de este desperfecto, los transeúntes pasan sin fijarse tanto en esta situación, el sol ayuda a secar un poco la superficie, sin embargo, la cantidad de líquido negro es mucha y termina por imponerse al concreto, y lo mantiene mojado.
