Al menos, 800 pescadores, de los mil 200 empadronados en la zona de los Bitzales, han abandonado sus anzuelos y redes para dedicarse a otra actividad y poder llevar el sustento a sus casas; luego de que por la contingencia ambiental de los cuerpos lagunares y ríos, sus productos no son comprados.
Denis Muñoz, presidente de la federación de cooperativas pesqueras de Macuspana, indicó que aunado a ello, el volumen de pesca ha caído drásticamente. Tras exponer que antes de la contingencia obtenían entre 20 y 30 toneladas mensuales de productos por pescador. Mientras, que ahora, únicamente, logran 20 o 30 pero kilogramos, para consumo propio.
“No nos creen y no nos lo aceptan en ningún lado. Nosotros lo consumimos por necesidad porque es la única fuente que tenemos para comer. Antes de la contaminación teníamos alrededor de 20 o 30 toneladas mensuales en cada cooperativa que eran distribuidas en distintos mercados; ahorita, solamente, estamos pescando de 20 a 30 kilos mensuales por pescador y es para consumo”, indicó.
A lo que continuó: Hay compañeros que se dedicaban a la venta de pescado y, ahorita, tienen otra actividad por que no están comercializando pescado de la zona. Cerca de 800 son los afectados.
Ante ello, envió un mensaje a la secretaria de Salud en Tabasco, Silvia Roldán Fernández, para que de ser cierto lo que pregona, en torno a que no hay riesgo en el consumo del pescado obtenido en estos cuerpos de agua, emita un documento con su firma, que avale la ingesta de sus productos.
