Pese a la estabilización de los precios de algunos productos como la carne, el tomate y el limón, el índice inflacionario sigue golpeando el bolsillo de los tabasqueños, sobre todo en el precio de los alimentos enlatados y bebidas elaboradas a base de azúcar. Mientras que el huevo no cede en sus precios y se mantiene alto, otros como el aguacate y la cebolla han empezado a descender respecto a los niveles que mantenían en los dos primeros meses del año.
A unas horas de que el INEGI dé a conocer los datos oficiales sobre la inflación de febrero, que tanto estimaciones privadas como el Gobierno ubican entre 5,8% y 6,2%, diversas consultoras coinciden en que marzo será un mes en el que los precios no mermaron en su escalada inflacionaria.
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De este modo, se prevé que la inflación alcance el 7%, no solo por la tendencia al alza registrada durante los primeros días, sobre todo en productos panificados, cereales y pastas, sino por los factores que históricamente han caracterizado al tercer mes del calendario, como son el cambio de estación y el inicio de clases.
A esto se suman los aumentos ya pautados en casi todos los servicios regulados. Cabe señalar que durante la primera semana de marzo, la escalada de precios de los alimentos y bebidas promedió 1,4%.
Aunque la cifra representa una desaceleración de 0,24 puntos porcentuales respecto de la semana anterior, ya se avizora alta para la proyección de la inflación general, que estará marcada por el aumento de las prepagas, las tarifas de gas, luz y agua, las cuotas de colegios privados, el transporte, los combustibles y los servicios de telefonía e internet.
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Respecto de la variación de las últimas cuatro semanas, el índice de alimentos y bebidas presentó una inflación de 6,4%, y de 5,4% punta a punta en el mismo período.
La escalada de precios en el rubro más sensible para los hogares de menores ingresos durante los primeros días de marzo estuvo compuesta por las siguientes categorías: productos panificados, cereales y pastas (3,65%), comidas para llevar (2,15%), frutas (2,07%), bebidas e infusiones para consumir en el hogar (1,29%), carnes (0,92%), lácteos y huevos (0,68%), condimentos y otros productos alimenticios (0,63%), aceites (0,53%), verduras (0,04%) y azúcar, miel, dulces y cacao (-0,57%).
Comerciantes de mercados públicos así como la Central de Abastos de Villahermosa han resentido estos efectos, al grado de que sus ventas disminuyeron considerablemente.
“La semana pasada las ventas cayeron en un 10 por ciento, pero esperemos que levante un poco antes de Semana Santa”, señaló Freddy “N”, locatario del mercado José María Pino Suárez. Indicó que algunos productos como el aguacate, tomate y limón han bajado en sus precios, pero otros como la papa y la cebolla todavía no ceden.
