Aunque hasta ahora no hay un respaldo 100% científico sobre la relación directa de las emociones con enfermedades como el cáncer, si está comprobado que ciertas situaciones como el estrés, tienen relación con problemas físicos como la migraña o ciertas afecciones en la piel.
Las emociones son reacciones psicofisiológicas que todos experimentamos a diario, aunque no siempre seamos conscientes de ello. Según la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (semFYC) al experimentar ciertas emociones se producen ciertos cambios de conducta que hacen que el individuo deje los hábitos saludables y por ende sea más susceptible a enfermarse.
Así mismo el sitio señala que se ha demostrado que la depresión es un factor de riesgo significativo de enfermedad coronaria, infarto de miocardio y mortalidad cardíaca y también se ha relacionado con una peor evolución de los pacientes coronarios.
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Pero no solo eso, hay quienes creen que las emociones podrían estar ligadas a enfermedades crónicas como el cáncer. El Dr. Ryke Hammer, neurólogo perdió a su hijo y posteriormente tanto él, cómo su esposa desarrollaron Cáncer.
Esto lo llevó a interesarse en el tema y realizar estudios para comprobar si el estado emocional de una persona, puede influir en su capacidad de reaccionar menos favorablemente ante una enfermedad. El especialista concluyó que, a raíz de un trauma emocional, una persona vive sentimientos muy fuertes que son capaces de generar cambios en el sistema inmune y por lo tanto ser más susceptible a enfermarse.
La relación de lo físico con lo emocional
La Psiconeuroinmunología investiga cómo las emociones, el estrés, la ansiedad o la depresión pueden provocar cambios tanto en el sistema hormonal como en el inmunitario. Para la escritora Louise Hay, la mayoría de las enfermedades se producen por heridas profundas que no fueron sanadas, rencores, secretos, aflicciones o pensamientos negativos.
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Según Angela Clow, profesora de psicofisiología en la universidad de Westminster el estrés ataca las defensas lo que puede llevar a sufrir deficiencia del sistema inmune nocturno, el cual es vital para protegerse del cáncer. Hablar de enfermedad y estado emocional, es hablar también de los trastornos psicosomáticos, según se explica, el mal uso de las emociones puede generar desequilibrios mentales que terminan provocando síntomas físicos.
Según el Hospital Alemán la psicosomatizacion puede producir dispepsia funcional, síndrome de intestino irritable, síndromes dolorosos (desde dolores articulares, cefalea o dolores lumbares o cervicales) o fatiga crónica.
¿Cómo evitar que tus emociones te enfermen?
Lo más importante es acudir con un especialista, principalmente en aquellas situaciones en las que se vivió un trauma muy fuerte o se está viviendo un duelo. Para esto un psicólogo, un terapeuta, o incluso un tanatólogo serán de gran ayuda. Según Daniel Coleman una manera para manejar las emociones es entenderlas, expresarlas y sobre todo atreverse a sentirlas.
Recuerda que lo que niegas no deja de existir, sino que se estanca hasta que decides escucharlo y hacer un cambio. Medita, existen en internet un sinfín de apps para meditar, videos de youtube o libros que te enseñan a hacerlo. Solo basta con que te tomes unos minutos para ser consciente de tu respiración y de tu cuerpo.
Recuerda que muchas veces nuestro cuerpo nos habla solo que no sabemos cómo escucharlo. ¿Qué estás sintiendo a nivel físico en este momento? Sé consciente de absolutamente todo, desde el dolor de espalda, una molestia en los pies o incluso un dolorcito interno. No se trata de que vivas reprimiendo las emociones para evitar enfermar, ya que esto solo produce el efecto contrario. Transitar las emociones es atreverse a darles lugar, sentir, y sacarlas de diferentes maneras.
El arte, el ejercicio, la palabra, escribir o incluso gritar son formas súper fáciles de poder sacar las emociones de forma positiva y sobre todo saludable.
