Donar sangre es una muestra de altruismo que puede de salvar vidas y promover la salud de numerosas personas.
La donación de sangre genera un impacto significativo en la vida de muchas personas, y estos son algunos de los beneficios que conlleva:
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- Con 450 mililitros de sangre, se pueden salvar hasta tres vidas.
- Mejora la vida del donante.
- La donación de sangre puede ayudar a aumentar la esperanza de vida,
- Mejora las condiciones ante enfermedades graves.
- Facilitar la realización segura de procedimientos quirúrgicos.
En el marco del día Mundial del Donante de Sangre, la Secretaría de Salud, en colaboración con el Centro Estatal de Hemoterapia, ha reconocido el acto de altruismo de aquellos que donan sangre, al tiempo que enfatiza la importancia de promover donaciones no remuneradas.
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Fernanda Cortázar, responsable del departamento de promoción a la donación del Centro Estatal de Hemoterapia, destacó la importancia de continuar fomentando la donación de sangre de forma desinteresada en beneficio de quienes más lo necesitan.
El Centro Estatal de Hemoterapia recibe mensualmente aproximadamente mil 500 donantes, provenientes tanto de familiares de pacientes internos como de la población en general.
¿Cuáles son los componentes de la sangre?
El Instituto de Salud para el Bienestar, menciona que la sangre posee los siguientes componentes sanguíneos:
- Glóbulos rojos: transportan el oxígeno y ayudan a eliminar los desechos.
- Glóbulos blancos: ayudan al organismo a combatir infecciones.
- Plasma: parte líquida de la sangre, sirve para transportar células, nutrientes y otros elementos del sistema inmunológico.
- Plaquetas: permiten la adecuada coagulación de la sangre.
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El Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado, menciona que existen estudios científicos que sugieren que las personas que donan sangre regularmente pueden experimentar una disminución en el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
Además, al donar, se obtiene un análisis médico exhaustivo que incluye la medición de la presión arterial, altura, peso y temperatura, así como pruebas de laboratorio como el hemograma completo, determinación del grupo sanguíneo y detección de enfermedades infecciosas como el VIH, hepatitis B y C, sífilis y tripanosomiasis, lo que proporciona una evaluación integral de la salud del donante.
