¿Por qué los perros aman tanto comer heces y otras cosas asquerosas?

Si quieres descubrir por fin por qué es que los perros comen las heces de los otros animales, entonces sigue leyendo

D. Osorio | El Heraldo de Tabasco

  · martes 27 de diciembre de 2022

Aunque suene asqueroso, todos alguna vez hemos sido testigos de cómo nuestros perros han comido heces alguna vez, además de otro tipo de cosas asquerosas, como su propio vómito, mocos, basura, etc.

Y es que según el estudio titulado “competition between domestic dogs and Ethiopian wolf” la ingesta de heces humanas en los perros africanos les proporcionaba una gran cantidad de proteína.

Así mismo, según lo que se narra del estudio que compara perros en libertad y lobos de etiopía, un 21 por ciento de la dieta diaria de los perros etíopes consistía en heces humanas.

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¿Las heces son malas para los perros?

Sí, según un estudio, cuando un perro come heces puede ingerir parásitos los cuales pueden perjudicar su salud, además de el riesgo que existe de que contraigan otro tipo de enfermedades.

Señalar que los perros no solo gustan de heces humanas, sino que también encuentran elementos biológicos en los excrementos de otro tipo de animales.

Sin embargo, este hábito podría estar relacionado a la herencia genética que tienen las mascotas con sus ancestros, aunque debes saber que hoy en día esto también representa un problema de comportamiento.

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¿Cómo hacer que mi perro deje de comer excremento?

Lo primero y más importante es que le enseñes a tu mascota a que haga sus necesidades en un sitio correcto y específico, además puede ser que el perro tenga algún trastorno de ansiedad, se sienta estresado y busque limpiar su entorno, así que trata de siempre mantener limpio el lugar.

Existen algunos remedios caseros tales como rociar la caca con tabaco o darle a ingerir piña después de que la haya comido, esto lo que busca es que se genere en el animal un sabor desagradable que asocie con las heces.

Es por eso, que lo mejor que puedes hacer es limpiar las heces de tu mascota inmediatamente después de que la haga, para evitar que se sienta atraído a comerla.