Misterios del cuerpo humano; curiosidades que no creerías

Estas curiosidades, incluso para los científicos, revelan un mundo sorprendente que día a día nos deja maravillados

D. Osorio | El Heraldo de Tabasco

  · viernes 8 de septiembre de 2023

La saliva, por ejemplo, es más que un mero facilitador de la digestión. Además de su función principal, contiene componentes antibacterianos y antifúngicos, como las inmunoglobulinas.  Foto: Cuartoscuro

El cuerpo humano en muchas ocasiones es un misterio. Estas curiosidades, incluso para los científicos, revelan un mundo sorprendente que día a día nos deja maravillados.

La saliva, por ejemplo, es más que un mero facilitador de la digestión. Además de su función principal, contiene componentes antibacterianos y antifúngicos, como las inmunoglobulinas.

Lee más: ¿Quieres bajar de peso? Alerta IMSS por ayuno intermitente

Trastornos en las glándulas salivales pueden impactar significativamente la vida de una persona, y aunque terapias con células madre se han explorado, aún no logran compensar plenamente su deterioro.

Aunque la respiración es un proceso natural, su relación con la percepción, emoción y cognición ha sido estudiada recientemente. Investigaciones como la de Psychological Review sugieren que la respiración no solo influye en el ritmo cerebral, sino que también modula el comportamiento sensorial, emocional y cognitivo.

El nacimiento de un bebé con aproximadamente 270 huesos es otra curiosidad. Estos huesos, formados por cartílagos, se calcifican con el tiempo y se fusionan, dejando a los adultos con unos 206 huesos. Sin embargo, este número puede variar dependiendo de factores individuales como el número de costillas, vértebras y dedos.

Recibe a partir de ahora las noticias más importantes directo a tu WhatsApp

Los sentidos humanos también despiertan asombro. En el caso del olfato, se creía que podíamos distinguir cerca de 10,000 aromas diferentes, pero un estudio en Science sugiere que esta cifra podría ser aún mayor, con potencialmente más de 1 billón de aromas que nuestro olfato puede diferenciar.

El intestino, considerado por muchos como el "segundo cerebro", alberga neuronas que interactúan con células inmunitarias locales, creando una conexión sorprendente entre el sistema gastrointestinal y el cerebro.

Este vínculo tiene implicaciones en patologías como la enfermedad de Alzheimer, Parkinson y la depresión, a través de desequilibrios en la microbiota intestinal. La dieta juega un papel crucial en la prevención de estas condiciones.