Los recientes casos de inseguridad en México han hecho que las mujeres tengan miedo de salir a la calle, pues se sienten expuestas ante la ola de violencia, feminicidios y desapariciones.
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Es por eso que muchas de ellas han preferido cambiar sus estilos de vida, evitando salir a ciertas horas, dejando de usar cierto tipo de ropa, frecuentar ciertos lugares o incluso llevar consigo armas que puedan servirles para defenderse en caso de sentirse en peligro.
Sin embargo, esta necesidad ha llevado a que empresas vendan artículos inservibles como gas pimienta de mala calidad, anillos con punta que en realidad no cortan o alarmas que no tienen el volumen suficiente para realmente generar una alerta.
Otros de los artículos que han comenzado a comercializarse son los inmovilizadores eléctricos, los cuales tienen formas de labiales y muchas veces también incluyen una pequeña lámpara. Sin embargo, este tipo de materiales más que ser una ayuda al momento de recibir un ataque podrían resultar contraproducentes.
Los kits de defensa personal pueden ser un arma de doble filo, ya que muchas de estas herramientas requieren de preparación antes de ser utilizadas, además de que por sus diseños pueden ser fácilmente arrebatados por los atacantes.
Podrían ser sinónimo de multa
Cabe señalar que el uso de algunos de estos dispositivos no están tipificados en el Sistema Penal en la mayoría de los estados. En este caso la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) cuenta con un Registro Federal de Armas de Fuego y Control de Explosivos tipifica al taser y al gas pimienta como artículos exclusivos de la fuerza del orden.
Sin embargo, en el Código Penal Federal no se señala su prohibición, aunque sí se menciona como agravante en caso de ocasionar lesiones u homicidios. Diversos especialistas mencionan que existen muchos huecos legales que podrían ser perjudiciales para quienes utilicen alguno de estos artículos como defensa personal.
