Una cuenta de Facebook muestra a una joven realizando un trabajo que normalmente hacen los hombres: el cortar caña. De ahí su nombre, Diana la cañerita (La cañerita). Levantarse en la madrugada, soportar horas al sol y sufrir cortaduras que provocan el manipular un machete, son los contratiempos a los que se exponen quienes realizan esta labor y Diana Martínez García, de 19 años, lo vive diariamente, quien en entrevista a El Heraldo de Tabasco comentó sobre su jornada laboral, por qué se dedica a esta labor del campo y sus planes a futuro.
En una nota previa, esta casa editorial mostró un poco de su calidad humana; a través de sus publicaciones, fotos y videos se pudo percibir a una persona agradecida con la vida, lo que fue corroborado por las respuestas que dio. “No estoy ocupada, tengo el día libre -fue lo primero que dijo, al preguntarle si accedía a dar una entrevista-, ahorita tengo tiempo”.
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A partir de ese instante comenzó una charla, donde cada respuesta dio detalles no sólo de su vida, también de su forma de pensar. “Claro que así es mi trabajo”, frase que salió al mencionarle que su labor, como cualquier actividad en campo, es pesada.
Siete meses en la zafra
Continuó: “Madrugar mucho todo los días. Son siete meses de zafra de caña, empieza en diciembre a junio o julio”. En este lapso, ella se levanta entre los 2 o 3 de la mañana: “Entro a las 2 a 3 de la mañana y regreso a mi casa a las 6 a 8 am (Sic)”. No importa que tiempo lleve la persona cortando las varas, es una actividad pesada. “El trabajo que hacemos los cañeros es pesado y cansado, que ya el cuerpo no aguanta más”, reconoció.
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Todos los días por más de medio año es llevada por su padre en moto a la plantación donde labora, ubicada en el poblado C-16 de Cárdenas, en este mismo lugar vive. El trayecto dura 15 minutos. Pero el señor no sólo va a dejarla, ahí trabaja. Él comenzó desde muy pequeño, contó la entrevistada: “Mi papá empezó a cortar caña de 7 añitos, y tiene 36 años cortando caña. (Sic)”.
Además de ella, una hermana de 17 años también se dedica a cortar caña. En total son 6 hermanos comenta, y es “la mediana”, señaló. Del porqué se dedica a esto, comentó que es por contribuir al gasto de la casa, así ha sido desde los 16 años en que comenzó en las plantaciones.
Gana entre 500 y 600 pesos
“Ya gano 500 o 600 pesos… a nosotros nos pagan por toneladas… y pues no le pido más a mi padre porque es para la comida de mi casa. A mi me pagan semanal, todo los viernes”, mencionó Diana, a quien sus compañeros de trabajo la estiman y admiran, le dicen que es una guerrera: Mis compañeros están felices porque se admiran que yo corte caña, y están alegres. Me dicen que soy una guerrera, me felicitan y me dan ánimos siempre. Mis compañeros hacen chistes para motivar a todos, y así tener unos días muy felices”.
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Sobre la situación de la mujeres en Tabasco manifestó: “Yo opino que no hay empleo para nosotras las mujeres. No hay un sueldo fijo para sacar a nuestras familias adelante. Mi trabajo de caña es temporal. Por eso doy un ejemplo, porque las mujeres podemos”.
Acerca de sus planes a futuro indicó: “Seguir adelante en mi trabajo, dar un gran ejemplo a las mujeres y a muchachas que sí se puede. Y mas adelante tener un buen trabajo. Además: “Casada y hacer una hermosa familia, y seguir mi vida normal”, concluyó Diana, ‘la cañerita’.
