El Atelier, el programa cultural de El Heraldo de Tabasco, tuvo una emisión más. Ahora desde el Centro Cultural Casa Aurora del ISSET, donde el actor Manuel Dehesa contó su trayectoria artística, y además se pudo disfrutar de la música de Choco Chepe y los Tamborileros.
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Los tambores y flautas del grupo que interpreta melodías características de la región, deleitaron con tres temas a los que seguían la transmisión a través de las redes de esta casa editorial. La danza de la paloma azul, Comalcalco y Guíndame la hamaca se escucharon a lo largo del programa.
Dando forma al personaje
Detrás del personaje de sombrero y vestimenta de manta blanca hay un joven que es Técnico Superior Universitario en Turismo. Pero su personaje surge a partir de que formar un grupo de tamborileros: “siempre tuve esa espina de formar un grupo de tamborileros, ya que mi papá, cuando yo tenía cuatro años, llevó a los tamborileros del maestro Hernán Avalos, y siempre me quedó esa espina de poder tocar”.
La necesidad de expresar esta forma de arte, lo llevó a formar la agrupación de Los Chaquistes cuando era prácticamente un niño. El nombre se los puso un conocido: “entonces decidí formar el grupo de tamborileros, en ese tiempo un amigo nos puso Los Chaquistes porque éramos puros niños, y éramos inquietos”.
Conforme fueron creciendo, las puertas se les abrieron a los tamborileros, comenzando a adentrarse en un segmento que pocos exploran, como lo son la música y las danzas indígenas. Es a partir de ese momento que surge Aj Joben, que en lengua yokotán quiere decir el tambor. La agrupación está formada por José Vina Olán (Choco Chepe), Karen de la Torre Pérez y Javier Alexander Pérez.
El líder de los tamborileros contó sobre la clasificación que hay en esta forma de expresión artística: “tamborileros tiene diversas clasificaciones que no lo vemos, pero el que está inmerso en el mundo sí. Por ejemplo, existe en los pueblos los tamborileros como acompañamiento a las fiestas patronales, en las cuales interpreta la danza del Baila viejo, la danza del Caballo y el gigante, la danza del Caballito blanco. También están esos tamborileros que son para presentaciones culturales, los cuales son para las ferias, eventos de las distintas instituciones gubernamentales, también están los tamborileros para esos eventos sociales, incluso los hay para la Educación Artística de reinserción social, y para los adultos mayores”.
Cuentos de mis ayeres
José Vina también contó sobre el proyecto Cuentos de mis ayeres, historias orales que contaban los abuelitos: “Cuentos de mis ayeres tiene que ver con las historias orales de nuestros abuelitos. La gente antigua nos contaba, por ejemplo que si los duendes, las apariciones, que si los tesoros, entonces todo”.
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El programa siguió y la conductora dio paso al siguiente invitado, el actor Manuel Dehesa, quien recordó sus inicios en 1997: “mi primera experiencia fue en el taller del maestro Jaime Olmedo, y creo que fue para mi descubrir un mundo nuevo; posteriormente tuve la oportunidad de acercarme en forma con lo que es ya un grupo de teatro como tal, y en ese sentido tuve la oportunidad con el maestro Vicente Gómez Montero en la Celestino Gorostiza, esto fue en el año 99”.
Sobre sus inicios reconoce que fue algo fortuito: “fue muy chistoso porque yo acompañé a un primo mío a una audición para un montaje de la compañía Celestino Gorostiza, la obra era La fierecilla domada. Lo acompañé, yo estaba ahí y me jalaron, y empecé a hacer una audición y fui seleccionado y ya de ahí entré, de hecho esa fue mi primera obra: La fierecilla domada, y en aquel tiempo recuerdo que la compañía se convirtió en la Compañía Estatal de Teatro de Tabasco; tenía 19 años en ese momento, y fue como mi primer experiencia en el teatro, y de ahí hasta el 99, 2003 estuve en varios montajes con otros grupos de teatro.
Emigró a México
El actor también nos revela cómo llegó a la Ciudad de México: “en el 2004, ya después de algunos años, cuando vi que esto iba en serio, ya no era nada más como de hobby. Ya después de haber participado en varias obras con el grupo, recuerdo La fierecilla domada, Don Juan Tenorio, Falsa crónica de Juana la loca, teatro clásico y unos que otros montajes de arte contemporáneo. Me decido, aquí había tenido la oportunidad de formación de maestros que vienen de México, pero obviamente, uno quiere más, quiere aprender mucho más, formarse mucho más y es una realidad que la CDMX es la meca del teatro en México. Entonces decido aplicar para un proyecto de beca que en aquel momento era el Fondo Estatal para la Cultura y las Artes de Tabasco, lo que hoy es el PECDA, y ahí metí un proyecto para estudiar en la CDMX un año, fui seleccionado afortunadamente, y que agarro mis maletas”.
Agrega: “he tenido la fortuna de que dirigieran muy buenos directores: Margarita Orrico. En México me tocó trabajar con directores como José Caballero, y me tocó una época en que él era el director de la Compañía Nacional de Teatro; fue mi maestro aproximadamente dos años”.
Sobre el teatro en Tabasco
“Veo una generación de chavos de una comunidad teatral que creo está retomando mucha fuerza; veo una fusión de jóvenes talentos con gente muy experimentada, veo una generación que le interesa conocer nuevos textos, textos contemporáneos, abordar nuevos formatos. Creo que hace falta formación, entrenamiento actoral; hace falta trabajar más fuerte en ese sentido, y quizás, salir a ver qué están haciendo en otros lugares”
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Seguir buscando, hacer proyectos de teatro, y también proyectos que se puedan dar en otros medios como cine o televisión. Me tocó hace un par de años ser parte del elenco de la serie de José José.
