Aunque Balancán, es un municipio rico en zonas turísticas, arqueológicas, biodiversidad, y con elementos geográficos y logísticos importantes, como su vecindad con Guatemala, y, su impulso por la llegada del Tren Maya; carece de infraestructura, tecnológica, turística y eléctrica.
Sus gobernantes municipales se han dormido en sus laureles y no han gestionados los apoyos suficientes para contrarrestar las citadas carencias.
Según algunos balancanenses, urge un pertinente y eficiente suministro de energía eléctrica, cuya implementación, ha sido evadido por las autoridades. Las empresas y el turismo, sufren de constantes cortes en la energía eléctrica y escasa calidad en el internet.
Igualmente, ante una población dispersa, por las condiciones geográficas del lugar, la atención básica a la salud, es bastante deficiente.
Increíblemente, uno de los municipios con mejor acceso al gran Usumacinta, y, a lagunas, así como a otras fuentes de agua; carece de un buen suministro del vital líquido.
Si se quiere impulsar el turismo, la producción de queso; así como a la industria forestal, y demás emprendedores de la región; es muy necesario, mejorar la infraestructura carretera.
Desde luego, todo lo anterior, requerirá de amplia participación de los sectores productivos del lugar, pero también de la capacidad de gestión y movilidad de las autoridades.
Las actuales, ni siquiera cuidan la infraestructura que lleva a los excelentes destinos turísticos y arqueológicos del municipio. Además, Balancán, requiere de un profesional plan de difusión y posicionamiento, de lo que puede ofrecer, integralmente, dicho municipio.
Para acabar de “j…abonar” la actual alcaldesa, ni hace, ni deja hacer, más preocupada por su futuro político, que por el de los balancanenses.
Como último recuerdo de su triste administración, no dejó que la sociedad civil, impulsará una embajadora, ante la imposibilidad económica de hacerlo ella. Prefirió salirse por la tangente, inventando una excusa, que nadie creyó.
Ante todo, ello, surgió como una candidata viable, al gobierno municipal, bajo las banderas de Morena, pero aliada, en los hechos, al PVEM, “la maestra Betty”; cuya posible victoria, da, a los que realmente viven en Balancán, una última esperanza.
Beatriz Castañón Félix, nació el 18 de septiembre de 1969, en la Villa El Triunfo Balancán. Es la cuarta hija, de ocho hermanos, del señor Salvador Castañón Figueroa; y, de la señora María Luisa Félix Mercado. Ambos de origen norteño.
Su niñez, transcurrió, en el rancho "Segundo Zacatecas" ubicado en la ranchería Pejelagarto, de aquel municipio de Los Ríos. Casada con el profesor Salvador Hernández París. Madre de tres hijos. Ya es abuela.
Su educación media, la realizó en la Escuela Secundaria Técnica No. 16, de la Villa, de donde es oriunda.
Es licenciada en Ciencias Naturales, egresada de la Escuela Normal Superior de Ciudad Madero, Tamaulipas. Cuenta con un posgrado en Ciencias de la Educación. Profesora de Telesecundaria en el ejido Tarimas, en Balancán.
Interesada en la política, desde sus mocedades, ha ocupado diversos encargos públicos, sobresaliendo su paso por la Dirección municipal de Atención a la Mujer.
Fue Consejera Estatal y Municipal del Partido Revolucionario Institucional (PRI). Titular del OMPRI de Balancán. En el 2018 renunció a dicho instituto político, cobijándose en el PVEM, donde ya fue Delegada Política municipal.
Frecuente aspirante, a la diputación, y, a la Presidencia Municipal, tanto, por el PRI, como por el PVEM. Ahora, lo está intentando por Morena, como candidata externa.
Tanto su esposo, como ella, pertenecen a la organización magisterial SITEM. Él, también ha ocupado espacios públicos, incluyendo el cargo de Regidor.
Ella, es Presidente, de la Asociación Civil “Manos y Voces de Balancán”, con la que ha desarrollado una importante labor social entre los balancanenses.
Tal parece que doña Beatriz, tiene todas las ganar, aunque no se haya logrado una eficaz y mayoritaria operación cicatriz, entre los más de veinte aspirantes que se apuntaran para la alcaldía. Además, ya lo enseña la conseja popular: “pueblo chico, infierno grande”.
Claro que hay oposición, pero no parece tener la fuerza suficiente para ser una alternativa. El ganadero Alfonso Gómez, pudo ser una opción, pero un jerarca de MC, no lo dejó pasar.
