En la principal universidad de Canadá que recibe subvención gubernamental y el respaldo financiero de las 100 empresas privadas más importantes de ese país para coadyuvar en la formación de estudiantes –de alto nivel- de todo el mundo, solo existe el registro de dos tabasqueños que obtuvieron ese beneficio, uno del Instituto Tecnológico de Villahermosa y otra el de una chica de una institución de educación superior privada de Puebla.
En las principales universidades del mundo como Oxford, MIT, Yale, Harvard, Stanford, Imperial College, Edimburgo, por mencionar a algunas de las que ocupan los primeros 20 lugares en el ranking mundial por su nivel de participación en los distintos campos de investigación se han formado reconocidos personajes, incluso Premios Nobel.
Actualmente es común ver en las citadas universidades a una gran población de estudiantes chinos e indios, algunos becados, el resto que son la mayoría paga su estancia académica que rebasa los 500 mil pesos por año, sin contar alimentación, transporte y hospedaje, toda una fortuna.
Es claro que China e India están formando a sus mejores estudiantes en las principales instituciones de educación superior del mundo mismas que se encuentran en países que son potencias mundiales en economía, ciencia y tecnología, paradójicamente China está acelerando el proceso para superar a Estados Unidos que mantiene el primer lugar mundial con una economía que rondó los 27 billones de dólares en 2023, en tanto que el país asiático ocupó el segundo lugar –así desde el año 2010- con 19.37 billones de dólares.
La interpretación de ese súbito incremento de estudiantes asiáticos en dichas universidades es simple, la búsqueda de la excelencia en sus procesos, aprender las técnicas e implementarlas en sus países de origen.
El caso de Argentina:
Con solo un tercio de la población total de México con 45 millones de habitantes, Argentina, tiene 3.18 investigadores por cada mil personas económicamente activas, es decir, ocupa el primer lugar en toda América Latina. De hecho el doctor argentino Bernardo Houssay y sus estudios de la diabetes asociados con la glándula pituitaria lo llevaron a ganar el Premio Nobel y ser el primero en América Latina en obtenerlo.
En Argentina, algunos laboratorios alemanes, financian investigaciones con jóvenes científicos argentinos en materia agropecuaria, en Chubut, otro grupo proveniente de instituciones públicas y privadas ensayan distintos compuestos a partir del erizo de mar en el que han encontrado infinidad de antioxidantes y complejos nutricionales que ya se emplean en la industria farmacéutica.
¿Y Tabasco?
Pese a contar con laboratorios especializados, con recursos importantes –incluso superiores a los de universidades argentinas- es poco lo que se desarrolla en investigación aun y cuando se cuenta con elementos favorables naturales para emprender mil y un experimentos, estudios, gracias al ecosistema que tenemos.
La Universidad Juárez Autónoma de Tabasco que inició un segundo periodo de cuatro años en la rectoría con Guillermo Narváez Osorio está impulsando algunas investigaciones en el sector agrícola, en la zona de Balancan, Jonuta y Tenosique, lo mismo que en acuacultura, independientemente de lo social-económico o en salud, pero aún falta más.
Es obvio que se perdió mucho tiempo valioso en las ocurrencias políticas de creación de universidades públicas por doquier, al final, la frialdad de la realidad dejó en claro que fue un despropósito.
Todas aquellas instituciones que reciben recursos públicos deben ser reconvenidas y explorar nuevos nichos de oportunidad.
Es el futuro de Tabasco y de México el que está en construcción y con ello la viabilidad como sociedad productiva.
CONTORNO
Alianzas políticas para las mayorías o interés personal
La claridad política que se aprecia como resultado altamente posible en la elección constitucional para gobernador de Tabasco en junio próximo está dejando sin margen de operación a la agonizante oposición en la entidad, en paralelo hasta aquellos que “disfrutaron” de los cargos públicos más importantes cobijados por sus institutos políticos a los que ahora niegan presumen su aportación, suma, respaldo político a favor de Javier May Rodríguez y de MORENA.
En realidad lo que menos importa es la sociedad y sus electores, ni los múltiples problemas que viven en sus comunidades tan solo se trata de supervivencia política personal y la posibilidad de alcanzar un cargo público remunerado.
La triste realidad de Tabasco…
javiermarinhdez@hotmail.com
