La peor noticia recibida por los habitantes de Cunduacán es la decisión de Abraham Cano González para presentarse a un nuevo periodo como alcalde. El ingenuo mozalbete, que en mucho recuerda a Samuel García por aquello de la inmadurez emocional, se equivoca de cabo a rabo si piensa en repetir el teatrito de presentarse con la etiqueta de ‘independiente’.
De acuerdo a los testimonios de la clase política local, pero sobre todo de los ciudadanos de a pie, hay un rechazo general a su gestión. No sólo incumplió la mayoría de las promesas de llevar el desarrollo al municipio, sino que reprobó de forma contundente en temas como seguridad, obra pública, asistencia social, salud, economía y gobernabilidad.
A menos que el ‘fosfo fosfo’ de la Atenas de la Chontalpa tenga otros datos, las cifras oficiales en cada uno de estos renglones son negativas, por lo que incluso corre el riesgo de que su cuenta pública sea reprobada por el Congreso local.
¿Y a que se dedicó entonces estos dos años? La vox populi coincide en que la mayor parte de su tiempo fue dedicado a perseguir a sus adversarios políticos y otro tanto a hacer alianzas políticas que al final resultaron un fiasco, como esa que buscó establecer con los morenistas Mario Llergo y Arquímedes Oramas Vargas. Con fotos de por medio como testigos, en ese momento enterró su perfil de ‘independiente’ ante la opinión pública. Por todo ello es que su reelección está destinada al fracaso, porque carece ya de esa frescura y el discurso innovador que lo llevó a un sorpresivo triunfo en 2021.
Dos casos muy diferentes son los de la alcaldesa de Centro, Yolanda Osuna, y el diputado federal Manuel Rodríguez González. En el primer caso, la exaspirante a la gubernatura tiene las puertas abiertas en Morena para buscar reelegirse, no sólo por un deseo personal sino porque se lo ha ganado a punta de los positivos resultados en su gestión.
Sin prisa y sin pausa, la morenista Osuna ha dedicado su mandato a realizar varias de las infraestructuras que la capital tabasqueña necesitaba desde hace décadas. Un caso muy específico es el Acueducto Usumacinta, que llevará agua potable a más de medio millón de habitantes. A la par ha instalado alumbrado público en las más diversas colonias populares y ha impulsado un programa masivo de bacheo en la urbe. Mención aparte merecen los apoyos a grupos vulnerables, mujeres, salud, inversiones y manejo eficiente del presupuesto público.
En lo político, ha sabido conducirse en los terrenos de la civilidad, sin confrontaciones o intrigas. Por eso es que el próximo gobernador Javier May no dudaría en trabajar con ella de forma institucional y mirando siempre el bienestar general.
El tema de Manuel Rodríguez González es muy parecido a este último. Al anunciar su interés en postularse para un tercer periodo consecutivo en San Lázaro, donde preside la Comisión de Energía, ratifica su interés en servir a la llamada 4T. En las grandes ligas de la política ha sabido ganarse una imagen muy respetada en todos los ámbitos. Sectores sociales, económicos y políticos del centro del país lo evalúan como un legislador con capacidad e inteligencia, de buenas formas al conducirse y siempre actuando de frente, sin maquiavelismos propios de esta esfera del poder.
Ha tenido el acierto de no olvidar a los electores de su Distrito, visitándolos a menudo, actuando como gestor ante los diversos planteamientos recibidos. Compitió por la candidatura al gobierno estatal, pero tras no quedar entre los finalistas enarboló un mensaje de unidad en torno a quien resultase ganador. Una vez que Javier May fue el elegido como abanderado, no tardó en darle su apoyo institucional.
En Movimiento Ciudadano también se han movido las aguas, esta vez en favor de Hernán Pérez Soto, designado por Dante Delgado Ranauro para ser el nuevo delegado nacional en Tabasco. El nombramiento no ha podido ser más congruente por los largos años de lucha que ha protagonizado en favor de estas siglas.
Afín a la corriente interna de Gerardo Gaudiano, se ha comprometido a trabajar por la unidad y reconciliación del partido en Tabasco, a cuyo frente despacha Pedro Palomeque Calzada. Puede decirse que Dante Delgado está buscando un mayor equilibrio de poder dentro de MC, dominado hasta ahora por el grupo de Pedro Jiménez León, padrino político de Palomeque.
Más allá de estas diferencias internas entendibles en cualquier instituto político del mundo, lo cierto es que Pérez Soto tiene como objetivo hacer una campaña de altura en favor de la candidata a la gubernatura, Minés de la Fuente. El objetivo de MC en Tabasco es ubicarse como segunda fuerza política, detrás de Morena y por encima del PRI y el PRD.
En el PRI, destaca el caso de Fabián Granier. Parece que el hijo del exgobernador Andrés Granier se ha ganado el derecho de ser postulado como candidato federal pluri, lo que no le impediría ser también abanderado por mayoría a fin de recorrer su demarcación a ras de tierra y conseguir el mayor número de votos para la causa tricolor.
El diputado local tiene el visto bueno de ‘Alito’, sabedor de que el primero y el Químico son los únicos con capacidad electoral para salvar al PRI tabasqueño de un eventual hundimiento en los comicios de 2024. Por razones de votos, Fabián lleva mano a la hora de repartir las candidaturas al Congreso de la Unión, e incluso se habla de su postulación a la alcaldía de Centro.
Y en Huimanguillo quien dio la nota fue el dirigente de la Asociación Ganadera Local, Agustín Pérez Meunier. El líder ganadero se apuntó para ser el abanderado a la presidencia municipal. Es su primer intento oficial, ya que aunque en 2021 la buscó, al final terminó por aceptar la decisión favorable de Morena en favor del muy cuestionado Óscar Ferrer Ábalos, que sólo se ha dedicado estos dos años a mal manejar el presupuesto público.
Lejos de ser un aspirante surgido de la nada o ser sólo producto de la ocurrencia, Meunier tiene tras de sí un importante apoyo ciudadano. Estos huimanguillenses le han pedido su presentación en el proceso interno, esperando que en el Municipio repita los resultados sin parangón tenidos en la Asociación Ganadera, a la que ha ubicado como una de las mejores de la región sureste del país.
Si todo se hace como Dios manda, nadie en Huimanguillo dudaría que el ‘bueno’ es este popular líder ganadero.
