En la colonia Tamulté, sobre sus calles Revolución e Ignacio Comonfort, un par de hombres, arremetieron contra otro, propinándole severos golpes con puños y patadas en tanto que los vecinos solo gritaban que era mejor que llamaran a la “patrulla”, a la policía.
Pasados los segundos, vino la aclaratoria. La aparente víctima del abuso del par de desconocidos, -el agredido-, resultó ser un ladronzuelo que pulula en la colonia que en un ligero descuido, se robó monedas de una combi del servicio público de ruta Tamulté-Buena Vista, que había precisamente aparcado en la esquina de las calles de la populosa.
Los agresores, no eran más que un par de chafiretes que al dar cuenta del robo, corrieron y alcanzaron al tipo y le dieron sus buenos golpes; recuperaron parte del botín, y por el escándalo que armaban los vecinos, solo acusaron del robo y decidieron partir. Quien prácticamente la libró de ir a la cárcel fue el ladronzuelo, que jamás se doblegó a la “patotiza” que le propinaron, y que evitó acabara detenido.
Los choferes partieron del lugar y el sujeto golpeado no hizo más que caminar y perderse en las calles de la colonia; golpeado y todo, pero en libertad. Hechos ocurridos a eso de las dos y media de la tarde .
