A pesar de sus gritos nadie acudió en su auxilio; fue la declaración de una joven de 15 años a las autoridades, al relatar el momento en que fue abusada sexualmente por un par de sujetos junto al cadáver de su novio, lo que ocurrió a finales de abril de 2017, en Huimanguillo.
El hecho criminal fue dado a conocer por los medios de comunicación el 1 de mayo de aquel año; la sociedad tabasqueña se enteraba de los terribles momentos que pasó la adolescente, y cómo un paseo con su amado se convirtió en una tragedia que la dejó marcada. Los momentos de horror y angustia ocurrieron a la sombra de la noche de un viernes a las 22:00 horas. Previo al ataque, los enamorados caminaban por los alrededores de la Unidad Deportiva Villa Estación Chontalpa, ubicada en la colonia Manuel Andrade.
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De la felicidad a la desdicha
Abel, al momento de su muerte, tenía 36 años y su novia era aún adolescente, sin embargo, esto no fue impedimento para que comenzaran a salir. En uno de esos paseos, lo que era felicidad se convirtió en desdicha. Ambos caminaban por el parque tomados de la mano, buscando un poco de intimidad.
Esa búsqueda de soledad los convirtió en presa de la inseguridad; dos sujetos encapuchados, y uno llevaba un machete los abordaron. La intención era clara: Asaltarlos. Pero al ver a la joven, comenzaron a manosearla, y al momento de estar tocando su cuerpo le dijeron que la iban violar. Al escuchar estas palabras el hombre los enfrentó, no permitiría que se cometiera tal atrocidad, pero poco pudo hacer; dos machetazos en la cabeza acabaron con su vida.
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En una mancha de sangre quedó el cuerpo
En una mancha de sangre quedó tendido el cuerpo, ahí en el silencio de la noche y a pocos metros del cadáver, la muchacha era mancillada. Tras saciar sus bajos instintos, los individuos se fueron del lugar. Unas personas que pasaron por el lugar vieron una silueta que se movía con dificultad, conforme se fueron acercando vieron a una jovencita golpeada y ensangrentada, que al verlos les comentó los terribles momentos que había pasado.
Los ciudadanos dieron parte a la Policía Municipal, que al llegar encontró al difunto. Procedieron a colocar la cinta amarilla esperando el arribo de los elementos de la Fiscalía General del Estado (FGE). Como procede en estos casos, el cuerpo fue trasladado al Servicio Médico Forense (Semefo), en donde fue reclamado por sus familiares; en tanto, la adolescente fue llevada a un hospital.