Los migrantes mexicanos que envían sus dólares desde Estados Unidos serán invitados a participar en la mesas de trabajo para discutir la reforma a la Ley del Banco de México (Banxico) que se encuentra por ahora frenada en la Cámara de Diputados.
La ley, que ya fue aprobada en el Senado por la mayoría de Morena, permite a los bancos recibir dólares estadounidenses en efectivo sin restricción alguna y obliga al banco central a captar los remanentes que los mexicanos no puedan intercambiar en la banca comercial.
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De acuerdo con sus defensores, esta reforma permitirá que las personas que reciben remesas en efectivo puedan intercambiarlos sin traba alguna. Sin embargo, varias voces, aun dentro de los que simpatizan con la Cuarta Transformación, han considerado que eliminar las restricciones actuales al intercambio de dólares representa un grave riesgo porque abriría la puerta del sistema financiero al dinero del crimen organizado, que genera buena parte de sus ganancias en dólares en efectivo. Además de que solo 1 por ciento de las remesas que entran a México llegan en efectivo, la inmensa mayoría se envía por medios electrónicos.
La reforma ahora se encuentra en la cancha de la Cámara de Diputados, que en comisión bicamaral con el Senado realiza preparativos para que en este mes de enero se delibere sobre el contenido y las consecuencias de la propuesta, escuchando a todos los actores involucrados como el Banxico, la Secretaría de Hacienda, la Asociación de Bancos de México y la Comisión Nacional Bancaria y de Valores con el propósito de lograr un producto legislativo acabado a mitad de mes.
Al igual que a los banqueros, el senador morenista y presidente de la Comisión de Hacienda de la Cámara alta, Alejandro Armenta Mier, considera que es importante escuchar también a los migrantes. “Pareciera un desprecio de las instituciones financieras a la comunidad de migrantes quererles endosar que será a través de ellos como se den los procesos de lavado de dinero del crimen organizado y de los grupos delictivos. Es una ofensa inaceptable que no se debe permitir”, dijo el legislador a El Sol de México.
Por separado, el senador Ricardo Monreal Ávila refrendó que ya se está trabajando sobre el tema que encabeza Armenta. “Él es nuestro representante. Morena actuará con responsabilidad y con apertura para, de ser necesario, enriquecer el dictamen’’.
Armenta Mier destacó que “interesa mucho que hablemos con los banqueros, pero no les importa que hablemos con los migrantes, hay que hablar con ellos, que haya representación para que puedan dialogar y escucharlos’’.
El senador señaló que en las mesas que se instaurarán los senadores de su partido mantendrán su posición de que la iniciativa defiende la autonomía del Banco de México y beneficia a los mexicanos. Aunque aclaró que es un tema que se tiene que consensuar con los diputados porque la minuta está con ellos.
MERCADO NEGRO DE DÓLARES
El presidente Andrés Manuel López Obrador ha referido en sus conferencias mañaneras que al cierre de 2020, “vamos a llegar a los 40 mil millones de dólares de remesas’’. Y aquí en México la circulación de dólares es abundante, dice el secretario de la Comisión de Hacienda en San Lázaro, diputado Marco Antonio Medina Pérez. “Los migrantes que ingresan al país y traen sus dólares no los pueden cambiar tan fácilmente en los bancos, los rechazan porque ya no tienen capacidad de repatriación y comienza a generarse un mercado negro donde la divisa pierde valor’’.
En los distintos balnearios mexicanos, pueblos mágicos, lugares arqueológicos y la zona fronteriza, el turismo internacional consume, paga y deja propinas en dólares a meseros, maleteros, botones, valet parking, camareras y al pequeño comercio, por lo que el problema es dónde cambiarlos, explica el legislador federal al destacar que la iniciativa busca dar solución a ese problema haciendo que los bancos adquieran las divisas a la paridad cambiaria actual y el Banco de México los remanentes de las instituciones financieras.
Para la presidenta de la Comisión de Hacienda en la Cámara de Diputados, la panista Patricia Terrazas Baca, señala que lo mejor es llevar a cabo un parlamento abierto donde se escuchen todas las voces de especialistas, académicos, migrantes, asociaciones de hoteles, sindicatos de turismo y comerciantes fronterizos. Advirtió que insistir como viene la iniciativa provocará la desconfianza de las calificadoras y de las autoridades de Estados Unidos, nuestro principal socio comercial.
En tanto, Medina Pérez consideró que el Banco de México no es intocable ni debe gozar de privilegios. “Los órganos autónomos están muy consentidos y que nadie los toque. No es posible que la autonomía la tomen como extraterritorialidad, se sienten intocables, hay que acabar con ese mito, pareciera que nadie puede decirles absolutamente nada’’.
