La diputada federal panista Madeleine Bonnafoux Alcaraz reveló que en México sólo el 24 % de las Secretarías en los estados es ocupado por mujeres.
Con ello no se estaría cumpliendo el principio de paridad de género a pesar de las reformas constitucionales que se aprobaron el pasado 23 de Mayo en el Congreso de la Unión.
En conferencia de prensa, precisó que en el caso de Tabasco de 16 Secretarías sólo hay 5 mujeres encabezando esas dependencias.
Además de que lamentó que Tabasco está entre los 10 primeros estados con más casos de feminicidios, razón por la que se debería considerar la Alerta de Género, que es la herramienta que tiene el Estado Mexicano para combatir los feminicidios.
Aunque dijo desconocer el número de muertes violentas contra personas del sexo femenino en la entidad, la legisladora consideró que si en Tabasco no se están dando resultados para su freno y combate, debe informarse qué se está haciendo al respecto.
La integrante de la Comisión de Igualdad de Género en la Cámara de Diputados federal, indicó que es evidente que la alerta de género puede asustar a los gobiernos, aunque es un instrumento importante porque implica un reconocimiento del problema y 12 pasos concretos para empezar a afrontarlo y desde luego disminuirlo.
Mencionó que esto es una cuestión de voluntad y capacidad política, aunque es difícil que en un gobierno pueda abatirse el problema que proviene de una cuestión cultural machista muy añeja.
En lo que respecta a la Paridad de Género, comentó que México está avanzando a paso lento en la inclusión de las mujeres en los espacios de poder público, ya que sólo el 24 % de todas las Secretarías de Estado están encabezadas por mujeres.
Explicó que con la iniciativa Paridad Total se pretende que sea ley la paridad en las regidurías indígenas, así como en las secretarías del Ejecutivo federal, aunque todavía no incluye a las direcciones y equipos de trabajo en los ayuntamientos.
Refirió que la inclusión al 50 por ciento de las mujeres se justifica porque debe haber igualdad en derechos para que estén representados los dos géneros en la toma de decisiones, ya que sus necesidades son distintas.
Agregó que un ejemplo de la disposición del ejecutivo federal para cumplir esto debe darse no sólo en Secretarías, sino en organismos descentralizados e instituciones como el Banco de México, la UNAM y la Comisión Nacional de Derechos Humanos.