Pese a las amenazas de posibles clausuras a los locatarios del mercado provisional ‘José María Pino Suárez’ que el pasado sábado no contaran con el equipo para accionar en caso de siniestros y botiquines, las autoridades municipales concedieron una extensión del plazo hasta que se muden al nuevo inmueble, en aproximadamente mes y medio.
En tanto, para poder mantener controlado el riesgo de explosión las anomalías encontradas en la operación de cilindros de gas y calderas, la coordinación municipal de Protección Civil realizará operativos cada dos semanas, y además, fueron colocados un total de 30 extintores de cuatro kilos y medio en diferentes puntos de esta sede provisional, localizada en la colonia Casa Blanca.
Dionisio Alejandro Zurita Valencia, locatario del área de tacos y refrescos, indicó en voz de sus compañeros que ellos si van a comprar el equipo, pero cuando estén en la nueva sede, pues no tiene caso que hagan la inversión en el provisional cuando están a semanas de irse.
“El presidente está tomando cartas en el asunto, que para el otro mercado todos ya tienen que tener el equipo, y si estamos de acuerdo, pero en este no es necesario que gastemos y además no tenemos el recurso”, acotó.
A lo que continuó: Estará protección civil contantemente revisando las instalaciones de gas en el mercado provisional, y no hay riesgo, de hecho hay extinguidores por pasillos que costeo el Ayuntamiento de Centro, no hay ningún problema y nosotros estamos a mes y medio de trasladarnos al nuevo mercado.
Como se recordará, fue el miércoles de la semana pasada cuando se giró una alerta ante una fuga de gas en el área de pozolería de este centro de abasto, que causó pánico entre los consumidores y comerciantes.
Derivado de ello, la Coordinación Municipal de Protección Civil realizó un operativo de revisión el cual arrojó que la mayoría de los 80 comercios de comida operaban sin las medidas de prevención y manejo necesarias, lo que convertía al mercado en una bomba de tiempo.
Ante ello, finalmente dio un plazo de tres días a los locatarios para que adquirieran un extinguidor y un botiquín, con una inversión estimada de mil 200 pesos entre ambas, un monto que los comerciantes dijeron no tener y pedirían un acercamiento con las autoridades munícipes para que se les concediera una prórroga.