Cada año la Secretaría de Salud del estado atiende un promedio de 100 adolescentes con ideas suicidas.
Aunque hasta el momento no se ha detectado la influencia negativa de las redes sociales para que las personas decidan salir por la puerta falsa, es una realidad que a través de éstas plataformas la población recibe mayor información como son los métodos para quitarse la vida, alertó Lucía Díaz Sánchez, jefa del departamento de Salud Mental de la dependencia sanitaria.
La ideación suicida es difícil encontrarla, refirió, por lo que se realizan acciones en escuelas para trabajar en grupo de población de entre 10 y 19 años de edad en las que aplican unos 2 mil 800 tamizajes.
“De la población con la que trabajamos alrededor de un 5 por ciento de los adolescentes que son tamizados pueden presentar alguna ideación suicida o algún nivel de riesgo que pueden ser desde la idea o el haber intentado quitarse la vida en algún momento anterior”, mencionó.
La experta expuso que la población juvenil se comunican más a través de las redes sociales y ahí mismo les llega más información negativa como la difusión de métodos para quitarse la vida.
“Han habido casos a nivel mundial donde se somete a encuesta el que una persona se quite la vida –¿En Tabasco se ha detectado?- Hemos encontrado chicos que dan aviso a través de redes sociales, en sus publicaciones escriben cosas, no hemos encontrado situaciones en los que se les aliente a quitarse la vida”, puntualizó.
¿POR QUÉ SE SUICIDAN?
La autopsia psicológica que aplica la Secretaría de Salud arroja que quienes se suicidan son personas que no tenían red de apoyo, además con problemas de alcoholismo y atraviesan por problemas de desintegración familiar.
Una de las principales maneras de prevenir el suicidio es que la persona esté lejos de los medios para auto infringirse, pero en el estado esa es una situación que no procede porque la mayoría de los suicidios que se cometen es por ahorcamiento.
El desempleo y las deudas no es una constante para que las personas se quiten la vida, destacó.
“En los casos de muerte que analizamos cada año se encontró que muchos de los que se quitaron la vida eran adultos jóvenes con un empleo, las deudas tampoco son un factor detonante”, especificó.
Finalmente dijo que cuando una persona se suicida no es porque quiera morir, sino es una salida a sus problemas y uno puede colaborar estando cerca, encontrar esas señales de alerta, porque el 90 por ciento de los casos dan aviso cuando las personas quieren quitarse la vida.
