La tecnología en estos tiempos de Covid-19 rebasó hasta a los Reyes Magos, ya que debido a las clases presenciales que mantuvieron por casi dos años, muchos niños se acostumbraron al uso constante de teléfonos celulares, tabletas o equipos de cómputo, razón por la que es difícil complacerlos este 6 de enero con otro tipo de diversiones.
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Sin embargo, hay algunas personas que notaron esta “adicción” de sus hijos a los aparatos tecnológicos, que optaron por voltear a ver los juguetes tradicionales mexicanos, la mayoría de ellos elaborados a base de madera.
Tal es el caso de la señora Trinidad Montejo, quien para estas fechas prefirió regalar a sus nietos juguetes tradicionales. Luego de visitar varios aparadores de los negocios de la Zona Luz, finalmente se decidió por una guitarrita de madera para su nieto de 5 años de edad.
“Esto es más bueno, porque ahorita ya es pura tecnología, cosas como el celular y eso les hace daño en la escuela”, comenta mientras paga a la encargada del comercio los 130 pesos que cuesta la guitarra.
Asimismo, señala que el pequeño ya no quiere los juguetes, porque es puro celular “y no quiero que siga con lo mismo”. Con domicilio en la colonia Reforma, la señora Trinidad confiesa que tuvo dos hijos que ya crecieron, pero ahora le tiene que regalar a sus dos nietos de 5 y 7 años.
Sin embargo, recomienda a otros padres de familia que como ella no se olviden de juguetes tradicionales mexicanos como el yoyo, el balero, instrumentos musicales y carritos de madera, entre otros. “Debemos hacer conciencia de que también la tradición de antes es mucho mejor que la de ahora”, manifiesta.
Como ella otras personas optaron en estas fechas por comprar juguetes didácticos y tradicionales en vez de videojuegos y juguetes con pilas, ya que consideran que los niños necesitan un descanso luego de casi dos años de clases a distancia en donde usaron mucho la tecnología.
