En un impresionante operativo, donde participaron fuerzas federales, estatales, municipales, de la Marina, seguridad de Pemex y el Ejército, abrieron los accesos al pozo Cibix-1 que, desde hace 26 días aproximadamente, se mantenían tomados por habitantes de cinco comunidades aledañas a la Colonia la Ensenada, en demanda de pagos de afectaciones.

El convoy compuesto por cerca de 600 elementos, así como policías antimotines de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, dieron apertura al acceso del pozo Cibix-1, ubicado en la colonia la Ensenada, desalojando a los manifestantes de la entrada, para darle paso a las pipas que ya esperaban, desde temprano, poder cargar la producción que el pozo mantenía desde hace semanas.

Y es que mientras por aire un helicóptero de la marina sobrevolaba el desalojo en la colonia la Ensenada, vía terrestre el operativos de las fueras federales se hizo presente; de manera inmediata se introdujeron las 10 pipas a las instalaciones petroleras, y fue puesto en marcha el pozo que desde hace más de 20 días estaba sin operaciones.

En medio de conatos entre los manifestantes y elementos de los cuerpos policiacos, las fuerzas del orden lograron su cometido y tras realizar barricadas lograron tomar el control y, con ello, permitir el reinicio de las actividades dentro del pozo.

Los bloqueadores dejaron en claro que su manifestación es pacifica, aun así fue desecha, ya que el cometido de las fuerzas federales y estatal era de abrir los accesos al pozo y sacar, con ello, la producción de petróleo que se mantenía retenida a causa de la manifestación de hace más de 26 días.

A pesar de que los bloqueadores expresaron de manera insistente que volverían a bloquear los accesos, se dijo que a partir de ahora, los elementos de la Marina así como de elementos de seguridad de Pemex serán los encargados de custodiar el convoy de pipas que, desde ahora, extraerá el hidrocarburo.

“Esto es una atropello a nuestros derechos humanos, exigimos solo el pago por las afectaciones que nos realizan”, expresaron los ahí presentes, que dejaron claro que estos seguirán en su exigencias de que se les pague sus daños a sus cultivos, animales de traspatio entre otros daños que se ha causado al entorno, tras la extracción del petróleo de la megapera así como por el desfogue del mismo.