Liberan acceso a fraccionamientos

Tras los conflictos que genera la colocación de rejas, vallas y plumas en los accesos a fraccionamientos de Villahermosa, una acción que además está prohibida por ley; el Ayuntamiento de Centro inició con el levantamiento de estas estructuras.

Raquel May Olán

  · miércoles 6 de marzo de 2019

Ciertos conjuntos habitacionales que no cuentan con los permisos correspondientes. /Javier Chávez

Tras los conflictos que genera la colocación de rejas, vallas y plumas en los accesos a fraccionamientos de Villahermosa, una acción que además está prohibida por ley; el Ayuntamiento de Centro inició con el levantamiento de estas estructuras en los conjuntos habitacionales que no cuentan con los permisos pertinentes.

Así se pudo observar en el fraccionamiento ‘Guadalupe’, asentado sobre la Avenida México de esta ciudad capital, en donde habitantes iniciaron en 2016 un proyecto vecinal para la colocación de mallas metálicas, plumas de control y portones, sin embargo, fue hasta finales del 2018 cuando anunciaron que solicitarían ante el Ayuntamiento de Centro los permisos oficiales.

No obstante, aunque dichas anuencias les fueron negadas, los vecinos de la colonia continuaron con el cierre por lo que las autoridades municipales en turno colocaron cintas de clausuras en los portones, siendo hasta esta actual administración de Centro que se procedió al retiro de los mismos.

De acuerdo a un recorrido realizado por este medio de comunicación, hasta el momento, este ha sido el único conjunto habitacional al que se le han retirado las estructuras, permaneciendo aún en otros, en donde se ha ventilado que también fueron cerrados al margen de la ley.

Cabe mencionar que colocar rejas, vallas o plumas de vigilancia en conjuntos habitacionales está prohibida por la ley, además, es una acción violatoria de derechos humanos por que limita la libre circulación, discrimina a las personas, dificulta su acceso, provoca fragmentación social, aunado a que aísla y obstaculiza la movilidad.

De manera conjunta, a como se ha dado en algunos casos en Villahermosa, provoca conflictos entre vecinos por la imposición de cuotas o la restricción a la circulación. Sin embargo, se ha vuelto costumbre porque aumenta la sensación de seguridad de quienes quedan al interior de esas rejas.