La directora de Análisis y Estadística de Observatorio Ciudadano de Tabasco (OCT), Julia Arrivillaga, señaló que si la ciudadanía insiste en tratar de linchar a los delincuentes es porque las autoridades no han garantizado la procuración de justicia y el fin de la 'impunidad', pues la gente está cansada de ver que se cometen delitos, pero nadie paga por ellos.
Destacó que la amenaza de los pobladores de Tamulté de las Sabanas y lo ocurrido la noche del domingo en Nacajuca, donde los ciudadanos colgaron a un presunto delincuente, al que tundieron a golpes, es una consecuencia que se pudo prevenir, porque la población tiene meses advirtiendo con que se hará justicia por propia mano.
Sin embargo, enfatizó que esto debe ser un signo de alerta para la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana y la Fiscalía General del Estado, ya que urge que actúen para impedir que Tabasco entre en una 'anarquía' donde cualquiera pueda perder la vida a manos de una turba enardecida, sin que obre un juicio legal de por medio.
"Eso sería gravísimo, creo que no podemos permitir que pase algo así. Tenemos que confiar en las instituciones, pero también es necesario que esas mismas instituciones sean fortalecidas y hagan bien su trabajo”, expuso.
El día –continuó– que nuestras autoridades dejen su trabajo en manos de una comunidad habremos perdido mucho como sociedad.
Añadió que es sabido en qué zonas hay "focos rojos", pues sus mismos habitantes se han encargado de colgar mantas para que tanto la policía como la delincuencia sepan que no dudarán en actuar si atrapan a alguien haciendo algo ilícito.
