Integrantes del Colectivo de Mujeres de Tabasco denunciaron los presuntos atropellos y vejaciones que tuvieron lugar durante la marcha que encabezaron el pasado 25 de noviembre en la ciudad de Villahermosa.
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“Fuimos violentadas el día de la Eliminación de la Violencia Contra las Mujeres porque vivimos en un Tabasco misógino y feminicida, pero no estamos solas y ¡No nos van a callar! Exigimos a las autoridades garantizarnos una vida libre de violencia”, publicaron en sus redes sociales.
A través un video con duración de 8 minutos y 19 segundos, el colectivo narró cada uno de los actos que aseguran, pusieron en riesgo su integridad durante la marcha.
“Somos las víctimas, no los criminales. El 25 de noviembre de 2021 y como cada año, las colectivas feministas tabasqueñas convocamos a una marcha separatista para conmemorar el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres.
“Niñas, adolescentes y mujeres salimos a exigir justicia por las más de 60 víctimas de feminicidio, y 101 desaparecidas en la entidad. Queremos exponer todas las formas en que este 25N fuimos reprimidas, acosadas y violentadas por acto y omisión del gobierno, tanto como la violencia machista de parte de sujetos que pusieron en riesgo nuestra integridad física.
“En la Fiscalía de Tabasco nos amedrentan. En la Fiscalía del Estado siete elementos armados y hasta sin cubrebocas se colocaron en medio de nuestro contingente y nos siguieron hasta la banqueta para amedrentarnos e intimidarnos.
“Automovilistas, motociclistas y choferes del servicio público nos agreden. Diversos sujetos a bordo de automóviles y motocicletas nos insultan y amenazan con atropellarnos. La unidad de servicio público Transbus, ahora Movitab, combi número F004 de la ruta Corredor 27 de Febrero, con cupo lleno y sin placas, atraviesa nuestro contingente a toda velocidad. Corrimos el riesgo de ser atropelladas.
“La policía no nos cuida. La patrulla 72777, que fue siguiéndonos desde que salimos de Fiscalía, no tomó ninguna acción en contra de los automovilistas, los motociclistas ni el chofer del transporte público que por poco nos atropellan. Pedimos su intervención y no hicieron nada.
“Reporteros nos violentan. A medio camino de nuestro recorrido nos percatamos que distintos hombres nos iban siguiendo, quienes después se identificaron como pseudo reporteros que, al cuestionarlos, confirmaron que fueron enviados por el gobierno.
“Uno de ellos, Felipe “N”, comenzó a grabar al contingente donde se encontraban mujeres familiares de víctimas de feminicidio, entre ellas una niña; al solicitarle que dejara de grabar, se justificó con que sólo hacía su trabajo.
“El agresor, Felipe “N”, al negarse a dejar de grabar, violenta el derecho de las niñas, niños y adolescentes, a la intimidad personal y familiar, y a la protección de sus datos personales, según el artículo 76 de la Ley General de los Derechos de Niños, Niñas y Adolescentes, ubicado en el capítulo 17: derecho a la intimidad.
“Además de que al intentar decirle que se alejara golpea a dos de nosotras, y le tira el celular a otra. Un sujeto interviene para defender a las compañeras. Julio César “N” empuja al sujeto y posteriormente, Miguel Ángel “N” corre hacia el cúmulo de personas a golpear a este sujeto, con total intención de conflictuar, y luego huye del lugar. Pedimos la intervención del personal de seguridad que resguarda el Palacio de Gobierno; no hicieron nada.
“Medios de comunicación nos revictimizan. Diversos medios de comunicación tergiversan los hechos, criminalizan nuestra protesta, nos señalan de violentar cuando nosotras fuimos las víctimas; ni los reporteros violentadores, ni los demás presentes, ni las autoridades que testificaron los hechos protegieron nuestra vida, nuestra integridad y nuestro derecho a protestar.
“Menos pintura naranja y más acción. Hacemos un llamado a los tres poderes de gobierno, a los medios de comunicación y a la sociedad en general, a pasar del discurso a los hechos, a dejar de gastar recursos en adornos para conmemorar la eliminación de la violencia contra las mujeres y hacer algo para eliminarla.
“Hacemos responsable al gobierno del estado por cualquier daño a nuestra durante el ejercicio de nuestro derecho a la libre manifestación. Estamos hartas: nos violentan y matan; vivimos en un Tabasco misógino y feminicida. No nos van a callar”.