Durante la mañana de este martes, arribó a Tabasco maquinaria especializada para iniciar los trabajos de desazolve de ríos, como parte de las estrategias anunciadas por parte de las entidades federales en su proyecto para reducir los riesgos de inundación.
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De acuerdo al programa, las acciones serán realizadas del 2021 al 2023, donde se tiene como meta el desazolve de 600 kilómetros.
En la primera etapa, está programado abarcar 42 kilómetros, iniciando desde Chiltepec, en Paraíso, Tabasco, en dirección hacia el río González, teniendo como desembocadura el río Grijalva.
Se espera recuperar la capacidad hidráulica de los ríos que desembocan al Golfo de México, beneficiando a comunidades ribereñas, zonas indígenas de Nacajuca y la ciudad de Villahermosa.
Entre lo planteado destaca que los materiales que sean extraídos serán colocados en tierra, con lo que podrían generar plataformas de mayor altura al río y poder brindar zonas seguras para maquinaria y ganado.
