Agradecida con Dios y con la vida es como dijo sentirse la pasajera del vuelo de VB1281 de VivaAerobus, Berzy Magaña luego del incidente ocurrido la mañana de este lunes en el aeropuerto de Villahermosa.

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Ella y su hijo de 12 años eran dos de los pasajeros del avión que tuvo que aterrizar de emergencia debido al desperfecto que ocasionó un ave en una de sus turbinas al despegar.

“La verdad es que íbamos apenas despegando cuando en ese momento escuchamos un ruido horrible como un golpe, y en ese momento desconectaron el avión, se fue la luz, el aire acondicionado y todo empezó a temblar y a hacer horrible”, comentó.

Al referir su testimonio a El Heraldo de Tabasco, comentó que fueron al menos 15 minutos de zozobra y angustia. Aunque afortunadamente el Capitán Piloto aviador pudo estabilizar, rodó y se logró aterrizar. “Estábamos todos asustados, había gente con crisis de nervios, dos personas se pusieron mal”, expresó.

Indicó que posteriormente les dijeron que les iban a tener que regresar más tarde porque el avión no iba a servir. Afortunadamente al regresar al aeropuerto, ahí estaban ya los bomberos y personal de protección civil por si el avión se incendiaba, y para atender a los pasajeros.

La tabasqueña comenta que fue una desagradable experiencia que no se la desea a nadie. “Son momentos de angustia, donde te pasa todo por la cabeza”, señaló. Pese a esta experiencia, dijo que está dispuesta a volver a subirse a un avión, y de hecho así fue, ya que a las 14:00 horas pudo reanudar su viaje a la Ciudad de México donde le realizarían unos estudios médicos a su hijo de 12 años.

“Le van a hacer un test porque tuvo cáncer y está en observación, pero gracias a Dios está bien”, comentó finalmente luego de que la vida les diera una nueva oportunidad a ambos al igual que a todos los pasajeros de este vuelo.