Luego de tres días de bloqueos en el estado de Tabasco que han desquiciado el tráfico vehicular, afectando a terceras personas que se ven impedidas a llegar a sus destinos por esta causa, las opiniones entre los usuarios de las redes sociales se dividen.
Insultos de todo tipo se pueden leer entre los comentarios de los cibernautas, quienes expresan su enojo por las acciones emprendidas en diferentes puntos, en las que además de todo, los manifestantes se olvidan por completo de la pandemia de Covid-19 que aunque se mantiene estable, sigue representando un riesgo latente, y sin embargo lo que menos se respeta son las medidas sanitarias como el uso del cubrebocas, gel antibacterial y guardar la sana distancia.
“Quehacer es que no tienen”, “por qué no esperan a que pasen por su casa, son necios”, será el cuento de nunca acabar con esa gente terca sin qué hacer”, “pero díganles de trabajar y eso no les gusta”, “qué culpa tienen las personas que vienen o van de su trabajo, por qué no van a casa de Adán Augusto”, son algunos de los reclamos que se pueden leer en distintas publicaciones.
Hubo quienes denunciaron que conocían a las personas que se encontraban obstaculizando el paso vehicular, y aseguraban que ni siquiera “se habían ido al agua”, y sin embargo ahí estaban, peleando el apoyo.
Otros más piden que se use la fuerza pública para liberar las vías de circulación: “métanlos presos por revoltosos mantenidos”, “ahora sí denles una paliza polis”, “hue… es que le faltan a ese pinche secretario de seguridad pública para levantar a todos esos flojos”, “gas lacrimógeno y garrotazos con ellos”, son las expresiones de los ciudadanos.
En el mismo sentido, otros usuarios externan su preocupación por el riesgo latente de contagios de Covid-19: “lo que hoy se hace en 15 días veremos los resultados… lástima, ni ese dinero les alcanzará para salvar su vida”, se lee en un post.
Pero como en todo suceso, también hubo algunas voces a favor, justificando el hecho al considerar que era la única alternativa para que fueran escuchados, ya que efectivamente, se encontraban desamparados luego de los daños que sufrieron en sus propiedades a causa de las inundaciones que dejó el Frente Frío número 4 a su paso por Tabasco.