División en el PRI por renovación de dirigencia estatal

Acusa el exgobernador Manuel Andrade al Comité Ejecutivo Nacional de pretender imponer un método con la intención de favorecer un "dedazo". "El que ya bailó, que se siente", le responde la diputada Katia Ornelas

José Guadalupe Pérez | El Heraldo de Tabasco

  · viernes 29 de noviembre de 2019

Andrade Díaz señaló que quien llegue al puesto tendrá que marchar contra corriente. Foto: Javier Chávez

El exgobernador del estado Manuel Andrade Díaz acusó que por parte del Comité Ejecutivo Nacional del PRI, pretendieron imponer un método para el proceso de renovación de la dirigencia nacional con la intención de favorecer “un dedazo”.

Indicó que fue una decisión del CEN de que fuera por asamblea por delegados y le dieran para para atrás al proceso de la consulta como era la intención.

Por ello, dijo que la legalidad del proceso está en duda y quien llegue a la dirigencia va a tener un trabajo muy pesado por todo el desaseo con que se pretende realizar.

Sin embargo, descartó que el gobernador Adán Augusto López tenga la intención de intervenir o meterse en la elección de dirigencia del PRI en Tabasco, aunque reconoció que los desaseos en el proceso abre lugar a especulaciones y suspicacias.

El exdiputado local dijo que resulta lamentable que el actual presidente nacional del PRI Alejandro Moreno Cárdenas, llegara a dicho puesto con la bandera de que abriría la elección de dirigentes de partidos a la militancia, pero aunque que en algunos estados sí se ha hecho de esa manera, al PRI de Tabasco se le ha negado por “falta de recursos”.

Refirió que en otros estados como Quintana Roo, Baja California y Guanajuato, el proceso se hará por consulta a las bases, y esto no se dio en Tabasco pese a que lo único que requiere una consulta abierta son reglas claras, comúnmente aceptadas, y condiciones de equidad.

Señaló que en la Asamblea Estatal donde se definió el proceso de elección de la próxima dirigencia del partido tricolor, se tomó una decisión ilegítima y con posibles ilegalidades, ante el desorden que se vivió.

Aunque se descartó para dirigir al PRI, Andrade Díaz dijo que los desaseos en la elección mete la idea de que pueda haber un candidato de línea, o que el gobernador Adán Augusto López quiera meter las manos en esta definición, entre otras suspicacias.

Añadió que esto podría ocasionar que quien llegue al puesto, tenga que marchar contra corriente, por la excusa de que no se pueda realizar una Consulta a las Bases, sino que la Asamblea de Delegados decida quién será el próximo líder del partido.