La deuda a largo plazo del estado de Tabasco sólo se ha reducido en mil 300 millones de pesos en 14 años de pagos. La deuda contratada en los dos últimos sexenios pasó de 7 mil 229 millones de pesos a 5 mil 923 millones de pesos en el último trimestre de este año.
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Esta deuda a largo plazo, diferente a la deuda a corto plazo que debe saldarse en menos de un año, se viene arrastrando desde el sexenio de Andrés Granier Melo, quien contrató en diciembre del 2007, una deuda con la banca comercial por el orden de los mil 500 millones de pesos.
Los datos publicados por la Secretaría de Finanzas del estado de Tabasco, en el tercer informe trimestral sobre la evolución de las finanzas de la hacienda pública estatal entregadas al Congreso del estado el pasado 28 de octubre, señalan que este monto contratado por “el químico” Granier, tiene como fecha límite de pago el 28 de noviembre del año 2033. Una deuda que se pagara en 26 años.
No fue el único empréstito contraído en el sexenio de Granier Melo. El informe de la dependencia estatal también registra los contratados por mil 319 millones de pesos en junio del 2011, otro de mil 600 millones de pesos en noviembre del 2012 y otro más en diciembre de su último año de gobierno por 659 millones de pesos.
En total, durante la administración de Andrés Granier Melo, el estado contrajo una deuda por 5 mil 79 millones de pesos.
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Durante el sexenio el perredista Arturo Núñez Jiménez, la deuda estatal a largo plazo continúo creciendo. En 2014 el exsubsecretario de Gobernación solicitó un préstamo por mil millones de pesos, otro más de 450 millones de pesos en 2016 y el último de 700 millones en abril del año 2017. Con recursos de este último se adquirió un dron de 12 millones de pesos que sólo algunos funcionarios de gobierno han visto. De los préstamos contratados por Núñez Jiménez, la de mayor plazo debe terminar de pagarse en el año 2034.
En total, durante el sexenio de Núñez se contrataron préstamos por 2 mil 150 millones de pesos, por lo que la deuda estatal llegaba a los 7 mil 229 millones de pesos, en siete préstamos solicitados por las dos administraciones pasadas, mismas que al tercer trimestre del 2021 registra un saldo de 5 mil 923 millones de pesos, después de 14 años de estar pagándolas.
Este monto se incrementará en breve ya que, durante los últimos días de agosto de este año, el Congreso del estado autorizó la contratación de mil 500 millones de pesos, que, a decir del gobernador Carlos Manuel Merino, serán usados el próximo año.
Por su parte, la deuda a corto plazo llega este año a los 3 mil 100 millones de pesos, mismos que deben pagarse en los próximos 300 días calendarios.
El negocio son los intereses
Mientras en promedio se pagan 100 millones de pesos al año del capital de la deuda estatal, los intereses pagados en cada ejercicio fiscal son cuatro veces mayores.
Los datos de la Secretaría de Finanzas del estado de Tabasco muestran que el pago de intereses de la deuda a largo plazo del estado se incrementa año con año. A pesar de que la dependencia estatal sólo ofrece datos del 2013 al segundo trimestre del 2021 relacionados con los intereses pagados por la deuda a largo plazo, es posible conocer que los montos pagados cada año han venido de menos a más.
Pasaron de 369 millones de pesos en el 2014 a 563 millones de pesos en el año 2020. En promedio, cada año el gobierno de la entidad paga a la banca comercial 464 millones de pesos, monto que se deja de utilizar para las necesidades del estado.
A pesar de la política de austeridad que se ha implementado en la actual administración estatal emanada de Morena, cada año se han contratado diversos montos como deuda a corto plazo y fue en este 2021 que se autorizó el incremento de la deuda a largo plazo en mil 500 millones de pesos. La austeridad prometida por Morena toco con pared.